Si echaba la vista atrás, hacia las últimas semanas, podía recordar los días exactos en los que estuve más inspirado escribiendo canciones.
Fueron los días en los que alcancé alguna cumbre emocional; días en los que la carta que encontré en Química era graciosa, sentida o triste, o cuando descubrí que quien las escribía era Tae Hyung.
Aquellos fueron los días en los que los versos parecieron salir a flote de mi interior en una ola de sentimiento.
Ahora, solo días después de haber besado a Tae Hyung por primera vez, pero a falta de menos de una semana para acabar un tema para el concurso, la tensión era un sentimiento que, definitivamente, no me estaba ayudando en nada.
Mi hermano tampoco me estaba resultando de mucha ayuda:
Estaba cantando a todo pulmón unas canciones pop que le encantaban y, al mismo tiempo, me estaba diciendo que tenía que intentar que mi canción se pareciese más a la que fuera que estuviese cantando él.
— Por favor, te lo suplico. ¿Puedes callarte?
Me había comprado una guitarra de segunda mano por Internet con el dinero que me había dado y me sentía muy desagradecido por querer echarle de la habitación.
Ya había dado con la que me pareció que era una buena melodía, y lo único que conseguía él cantando era desconcentrarme.
Solo tenía que terminar la letra.
— Si me dejas solo durante una hora, te lavo la ropa durante una semana.
— Me agrandarás todas las cosas a propósito para poder ponértelas tú —dijo Jimin.
No era una mala idea.
Me levanté, le agarré por los brazos para ponerlo de pie, lo cual fue más difícil de lo que pensaba, y le deposité fuera de la habitación.
— Una hora.
No se resistió, y le oí cantar mientras andaba por el pasillo.
Me hundí en la cama y volví a tomar la guitarra.
Se suponía que el silencio debía inspirarme, pero tenía la mente en blanco.
Agarré el móvil y mandé un mensaje rápido:
— Necesito inspiración.
Tae me respondió con una selfi poniendo una cara seductora y me reí.
— Ya. Eso no funciona.
— Es lo único que tengo —contestó— Mala suerte. ¿Estás escribiendo una
canción?— Lo intento. Me queda una semana.
— Seguro que lo consigues. ¿No tenías un cuaderno entero lleno de letras de
canciones? ¿Habrá algo ahí que puedas utilizar?Me quedé mirando el cuaderno que tenía en la mesilla de noche.
Mi canción favorita era la que había escrito sobre él:
Abandonado.
No podía usarla.
No tenía derecho a asignarles sentimientos y palabras a sus experiencias.
— Algo se me ocurrirá —respondí— Y ahora, déjame en paz, ¡que estoy
intentando escribir!Me mandó otra selfi con cara de modelo, me reí y guardé el teléfono.
[🥀]
El lunes, Tae se me acercó por detrás en el aparcamiento del instituto y me levantó del suelo en un abrazo.
Solté un chillido de sorpresa.
ESTÁS LEYENDO
✔ ✏ 𝓟𝓓. 𝙼𝚎 𝙶𝚞𝚜𝚝𝚊𝚜 「TK」
Random-: ✧ :-゜・. • • • -: ✧ :-゜・. Para distraerse en clase de Química, Jeon JungKook escribe en la mesa un fragmento de la letra de una de sus canciones favoritas. Al día siguiente, descubre que alguien escribió la continuación de la letra de la canción...