Las voces y la música hacian revuelo en el lugar. Aquel club se encontraba repleto esa noche.
La cabeza de Jay daba repetidas vueltas mientras reía en compañía de sus amigos. Palabras y algunos balbuceos. Si que estaban pasados.
Jay palmeó la espalda de Sunghoon.
─ Hey, iré al baño, ¿Vale?
El más alto se tambaleó y con una estúpida sonrisa asintió repetidas veces, dándole poca importancia a lo que sea que su amigo le haya dicho.
Jay tocó su frente mientras se abría paso entre esas personas. Se sentía mareado.
Al llegar al pequeño cuarto, Jay se recargó en el lavabo mirando su reflejo en el sucio espejo que se encontraba frente a él. Parecía que el espejo le decia que era tiempo de ir a casa. Espera, ¿El espejo le estaba hablando? Talló sus ojos, no, claro que no. Era una total locura.
Aún no iría a casa. Todavía no terminaba.
Salió decido del baño sosteniéndose del marco de la puerta para no perder el equilibrio. Achicó sus ojos viendo el suelo, ¿Eran sus zapatos? ¿Era él acaso? O bien, tal vez estaba alucinando nuevamente.
Caminó a cómo pudo por el pasillo palpando su celular en los bolsillos del pantalón, lo tomó y lo encendió.
03:00 A.M.
Daba igual. Tenía que hacerlo cambiar de opinión.
Comenzó a teclear en su celular un mensajes apenas entendible y envió cada uno de ellos. Recargado en la pared del pasillo pasó su fría mano por su rostro esperando respuesta. Pocos minutos después sintió la vibración en su mano. Rápidamente vió la pantalla de su celular.
Jay... · 03:04 A.M
¿Es enserio? · 03:04 A.MJay vió los mensajes, quedando completamente en blanco.
¿Por qué sólo me llamas cuando estás drogado? · 03:05 A.M.
El alto reaccionó y comenzó a caminar hacía la salida del lugar.
─ ¡Jay!
Escuchó su nombre a lo lejos pero no le importó y salió por completo del lugar. Afuera se tomó el tiempo de respirar profundo y comenzar su camino.
Sus pasos eran pesados y su caminar era disparejo. Su vista estaba nublada y su cabeza bajo los efectos de la droga no le ayudaba en nada.
Llegó a una esquina y paró en seco.
─ Mierda, q-qué-
Llegó a un poste de luz y se recargó en él, tomando su celular y viendo nuevos mensajes.
¿Hola? · 03:09 A.M.
Jay tragó duro, y se armó de valor de una vez por todas para marcar el número.
Uno, dos, tres, cuatro pitidos.
─ Hola.
No hubo respuesta.
─ Jungwon...
─ Dios... Siempre haces esto. Ahg.
La confusión en el tono de voz del menor era notable.
─ Yo me preguntaba si estás en casa...
El chico trataba de mantener su voz firme.
─ Jay-
El mencionado decidió seguir caminando con el celular pegado al rostro pero cada vez se le hacía más difícil escuchar al otro.
─ Jungwon, necesito verte.
Jay cortó cualquier tipo de cosa que le estuviera diciendo el menor.
Del otro lado estaba Yang, sintiéndose confundido. Recibía llamadas y mensajes de Jay en la madrugada, eso normalmente era cuando se encontraba drogado, incluso puede decir que se acostumbró a ello pero... ¿Verlo? Eso era distinto.
No se miraban desde que habían terminado.
─ Por favor...
Jungwon asintió aún sabiendo que no le podía ver y colgó la llamada sin más.
Jay se quedó viendo fijamente el celular. ¿Había sido un "sí"? Probablemente. Siguió caminando, esta vez aceleró su paso, sientiendo su respiración agitada.
Minutos pasaron y llegó a esa conocida calle sintiéndose aún más acelerado.
Un escalofrío recorrió su espina dorsal al ver esa casa que le resultaba tan familiar.
Apresuró aún más su paso y corrió, enrendándose los pies en el trayecto. Cuando estuvo frente a la puerta respiró hondo para después recargarse y comenzar a tocar repetidas veces.
─ A la mierda los vecinos. ─ dijo para si mismo cuando notó que tocó un poco (demasiado) fuerte.
Dejó de tocar cuando escuchó pasos a través de la puerta y se alejó de esta. Su corazón se aceleró en sobremanera cuando la cerradura se comenzó a mover.
Y ahí estaba él, su hermoso y perfecto Yang Jungwon. Tal y cómo lo recordaba o tal vez más bonito de lo que ya era. ¿Lo había despertado?¿Estaba a punto de dormir? Se preguntaba Jay, ya que llevaba puestos aquellos shorts cortos que tanto le gustaban a la hora de dormir juntos. Era un manojo de nervios.
Y que podemos decir de el menor que estaba igual o peor que él. Los nervios y tensión se palpaban en el aire.
Jungwon miraba detenidamente a Park. Alzó un pco su mirada ya que el chico le sacaba algunos centímetros. Portaba su maldita chaqueta de cuero y su cabello se pegaba a su frente gracias al largo camino que había recorrido del club a la casa del castaño. Sus clásicos jeans y sus ya desgastadas botas. Siempre lograba verse tan jodidamente bien a pesar a la situación, fué lo que pensó Yang.
El pecho de ambos subía y bajaba. Después de algunos segundos ambos conectaron miradas.
Jay no soportó por más tiempo y se lanzó hacia Jungwon, tomándole por la cintura. El menor no se quedó atrás y tomó el rostro de Park entre sus manos para después acercarle y finalmente unir sus labios en un profundo beso.
Jay cerró a cómo pudo la puerta con la punta de su pie mientras Jungwon besaba desesperadamente sus labios. Jay pasó sus manos por los muslos de Yang para levantarlo y así cargarlo, este enredó sus piernas en la cintura del más alto dejándose hacer.
Pese a la situación, estaban concientes de lo que iba a pasar pero no les importaba en absoluto.
A Jungwon no le importaba si estaba tomando una mala desición y a Jay no le importaba si en la mañana Yang lo mandaba nuevamente a la mierda.
Sólo querían sentirse una vez más esa noche.
Hola🤗 esta es mi primera historia cómo verán es una adaptación de la historia de -hxngni . Muchas gracias por permitirme hacer esto.💘
Espero les haya gustado engenes y jaywonistas😻
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Why'd you only call me when you're high? ~ Jaywon
RandomEn donde Jay llama a jungwon sólo cuando está drogado ~Ship: Jaywon ~ One shot - Una sola parte ~Esta es una adaptación ~Esta es una historia original de : @-hxngni todos los créditos a la autora