Historia

169 18 3
                                    

35... 36...

Los latidos de mi corazón.

La alegría de estar vivo después de un accidente automovilístico era como un néctar en estos momentos.

Nunca creí que llegaría hasta este entonces, mi capacidad para escuchar fue arruinada por completo después del accidente, los médicos de emergencia cargan mi cuerpo dentro de una ambulancia... todo se siente tan frio.

37... 38...

Los recuerdos de mi esposa, hijos sonriendo frente a la cámara aquel dos de abril del 2001 pasan por mi mente, y no puedo evitar maldecir internamente.

¡Mierda, si tan solo!...

Ja, curioso, siempre nos castigamos mentalmente por no haber hecho lo suficiente aquel entonces, por no haber hablado con esa bella chica en la secundaria, por no esforzarnos un poco más hace años, no importa cuánto desespere ahora, no hay nadie que escuche mis lamentos.

39... 40...

Mi alegría prevía por estar vivo se transforma en angustia, cada momento, cada segundo se siente como horas, creo que puedo reflexionar y recordar mi vida en tan solo medio minuto.

Los médicos hacen lo posible para mantenerme consciente, pero puedo ver la desesperación en sus miradas, el lamento y la resignación.

40... 41...

Esta vez se sintió más lento, más leve, y, sin embargo, más cálido.

42... 43...

"Las oleadas de calor comenzaron a llegarme desde lo más profundo de mi corazón".

No lo sentí solo un momento, fue... repentino, un calor que llegó para quedarse en mi cuerpo moribundo.

Deje de escuchar los latidos, no había más, no había sonido, no podía ver.

Nada, absolutamente nada...

¿Señor?

Fui y soy profundamente religioso, la creencia me lo inculco mi abuelita que en paz descanse, ella sonreía siempre con sus dientes amarillentos, su cara arrugada y su mirada cansada.

No era una vista agradable para una persona que no la conociera, pero la abuela llenaba a mi familia de una sensación de tranquilidad con solo su presencia.

Como una buena tarde en los que te olvidas de los problemas.

Íbamos con ella a la "casa del señor", un término que usábamos en mi pueblito para referirnos a una iglesia.

Millon.

Según mi conteo, debieron haber pasado un millón de segundos, no estoy seguro, no hay nada para confirmar y no hay nada mejor que pueda hacer.

"Se trasladarán las reservas de energía a la fuente".

Se escuchó la voz de algo mecánico, estaba seguro de que no era español, pero podía sentir el significado dentro, muy dentro de mi consciencia.

Pude ver nuevamente...

Lo que... había alrededor de mi eran montones de luces transparentes, sin formas, solo condensaciones de destellos permanentes.

Arriba de nosotros había un domo de lo que parecía ser cristal, estaba dentro de este domo con cientos de luces, todos ellos parecían estar confundidos.

Mirando hacia abajo me percato de que yo también soy una condensación de destellos.

Ni siquiera sé cómo funciona esto, no tengo cerebro, ni sistema nervioso, nada para ver ni oír, pero puedo hacerlo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 02, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Conocí a DIOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora