¿VOLVER A ENAMORARME?

CAPÍTULO 44

WÁNAX
(Maratón 2/4)

Me como una galleta con helado, me siento en el salón junto a caramelo y a mi hermano.

—¿Lo mataron?— preguntó hablando del programa de televisión.

—Los polis no alcanzaron a llegar.— dice Caramelo metiendose una puñada de palomitas en la boca.

—Os quiero muchísimo.—digo de repente mirándolos.

—¿Estas bien?—pregunta Ara.

—Yo también ojitos. Muchísimo—dice Caramelo colocando su mano en mi rodilla.

—Solo que tuve una pesadilla. Y eso, os quiero muchísimo, sopencos— digo abrazando a cada uno con un brazo.

—Ahí está.— dice Ara al escuchar "sopencos"

Les suelto fingiendo asco, y reímos un poco hsta que suena el timbre.
Voy corriendo y al abrir la puerta sonrió tontamente, esta Zack de pie con una caja con agujeros en sus brazos.

Me mira de arriba a abajo y recuerdo que traigo la pijama que a él tanto le gusta. Sonrió y le empujó adentro, con cuidado, cierro la puerta y él me mira un poco serio pero divertido, su mirada me dice que está planeando algo.

—¿Que estas planeado?—entre cierro los ojos y él me tiende la caja, la cojo con cuidado.

—Para ti.— dice y me invita con un gesto a abrir la caja. La abro cuidadosamente y al ver lo que hay dentro me derrito de amor al ver esa cosita peludita y chiquitita.

—¡Un gato!— digo cogiéndolo entre mis manos, tan pequeño es que en mis manos cabe perfectamente. Es un hermoso gatito bebé negro con los ojos verdes, divino.—Zack... mi padre me va a matar.— le digo mientras abrazo al gatito con cuidado.

—Lo encontré en esa caja, a dos calles de aquí, se que amas los gatos y yo no puedo tenerlo, el padre de Rose es alérgico y encima está en el hospital por el accidente—Explica acariciando la cabeza del gatito.

Levanto al gatito dejándolo a la altura de mis ojos, el gato me mira y maúlla muy tiernamente.

—Mm... te llamaras.. Steve...—le miró y niego rápidamente—No, mejor Chispi, no horrible... mmm... ¡Wánax!— le digo al gato y veo como Zack sonríe al ver como elijo un nombre.

—¿Wánax?—pregunta y asiento con la cabeza abrazando de nuevo al gatito y me dirijo al salón.

—Significa rey todopoderoso— digo y le enseño el gato a los chicos.

—Papá...— dice Ara al recibir el gatito en brazos, caramelo se le acerca y empieza a acariciarle

—Es niño. Le bauticé Wánax— explicó.

—Creo que te has ilusionado, papá no lo va a aceptar.— dice Ara mientras le da besos al gato.

—Pasa, es mío.— le arrebato con cuidado al gatito y me siento entre medias de ambos y dejo al gato en mis piernas, este se enrolla sobre si mismo y se pega a mi estómago, y se queda dormido mientras los chicos lo acarician.

Al escuchar la puerta nos quedamos todos quietos y en silencio, solo se escuchan los comerciales. Hasta hemos a dejado de respirar.