Rosé y yo +18 (Blackpink)

Confesiones confesiones

Esta situación es extremadamente injusta - me quejé saliendo del vestidor - o sea, si me coquetean es mi culpa, si respiro es mi culpa, por favor dime qué NO es mi culpa.

Que dramática - me respondió Rosé burlándose.

¿Dramática? - le pregunté enojada. No dijo nada, así que salí furiosa de la habitación y me fui directo al bar, pero busqué que me atendiera un chico y no la chica de antes, no quería volver a tener problemas. Justo estaban poniendo karaokes. Las Blink de antes me reconocieron, me llamaron y comenzamos a cantar canciones de BP. Lo estábamos pasando muy bien.

Ya iba en el quinto trago cuando apareció Rosé. Estaba bastante embriagada ya para ese momento.

Llegó la súper estrella, Rosie cántanos una - les murmuré a las Blinks y grité a Rosé riendo. Ellas rieron, también estaban borrachas.

Roseeeé - gritaron para que se sentara a la par nuestra.

Lo siento chicas, solo vengo a buscar a mi mujer para que no las moleste más - dijo Rosé. Las chicas gritaron de emoción. Esas Blinks era mis aliadas.

Rosé agarró mi brazo estrangulándomelo, pero sin que el resto se diera cuenta.

No me gusta cuando tomas así - me dijo al oído.

Y a mí no me gusta que me trates de infiel sin serlo - le respondí.

Entiéndeme, no confío en ninguna chica que te rodee - me dijo.

Entonces confía en mí - le volví a responder. Rosé asintió. Llegamos a la habitación.

Me acosté en la cama, estaba agotada. Rosé comenzó a desabrochar mi cinturón.

Rosie... estoy muy borracha - le dije. La verdad solo se lo decía porque al otro día me acordaría de la mitad de lo que hiciéramos, pero nunca me negaría coger con Rosé.

¿No quieres? - me preguntó quitando mis pantalones por los pies.

Siempre quiero contigo - le respondí. Rosé fue directo a mi ropa interior, la bajó un poco y comenzó a lamer mi clítoris con su lengua.

Aaaah Rosie - le dije.

Me encanta, sigue diciendo mi nombre - me respondió.

Rosie... - volví a decirle inconscientemente. Rosé siguió frotando su lengua contra mi fruto hasta que me hizo acabar en su boca.

Aaaaah mmmhm - le di un gemido gutural.

Amo cuando te vienes - me dijo - puedo sentir como pasas de estar dura a calmada.

¡Rosé! - me quejé. Rosé se iba a subir en mi regazo pero su pie torcido no se lo permitió. Como pude, dentro de mi embriaguez, la dejé abajo mío y la monté.

Rosie - comencé - te amo demasiado, nunca entenderás cuánto.

Rosé me miró perpleja. Comencé a darle estocadas y ella empezó a gemir.

Espera, quiero hablar más de eso - me dijo para que parara.

No, quiero follarte - le respondí dándole embestidas cada vez más agresivas.

Espera mmmhmm - se quejó. No paré.

No quiero hablar, quiero cogerte - le respondí agarrando su mentón y besándola con agresividad.

Aaaaaaahhh - gimió Rosé.

Voy a cogerte hasta que me supliques que pare - le susurré. Rosé intentó alejarme, pero no la dejé, seguí embistiéndola y dándole cada vez más fuerte.