Pokecuento: Cambiar al mundo

Capítulo 48: Fuerte...

Repentinamente una joven vulpix se encontraba en un frondoso bosque iluminado por el sol de la mañana, estaba confundida pues no recordaba haber llegado a ese lugar, más dejo de darle importancia cuando al ver frente a ella noto a una figura familiar a la distancia... Una que extrañaba profundamente...

— ¿Pa-papi? — Al ver a aquel jolteon shiny a la distancia, los ojos de Seki inmediatamente se humedecieron, él estaba nuevamente frente a ella, por lo que sin dudarlo ni un segundo corrió hacia él — ¡PAPI!

— Tienes que ser fuerte... — Dijo Kido mientras se alejaba de su hija, más no se movía, solo retrocedía mientras mantenía su posición estática, como si de alguna forma flotará.

— ¡Pero papi! ¡Yo no lo entiendo! — Respondió la vulpix mientras seguía corriendo con desesperación hacia su padre, dejando caer amargas lágrimas de tristeza — ¡¿Cómo hago eso de ser fuerte?!

— Tienes que ser fuerte... — Repitió el jolteon shiny como si no escuchará a su hija, mientras comenzaba a alejarse más rápido y una espesa niebla se hacía presente en el bosque.

— ¡Papá espera! ¡No te vayas! — Grito Seki desesperada al ver como su padre era envuelto por aquella niebla — ¡Quédate conmigo! ¡Dime cómo puedo ser fuerte!

— Tienes que ser fuerte... — Repitió Kido por tercera vez antes de desvanecerse en la neblina, más, sin embargo, su voz seguía escuchándose en el bosque, repitiendo esa frase una y otra vez.

El escuchar repetidamente esas palabras solo hacía que el llanto, desesperación y frustración de la vulpix se hicieran más fuertes, por lo que la joven pokémon solo se recostó en el suelo a llorar con impotencia...

— Papá... — Pronunció débilmente Seki entre su llanto — ¿Cómo lo hago?

Luego de unos segundos llorando, la joven vulpix repentinamente... Despertó, se encontraba en la habitación de huéspedes de la casa de Hoshi y Mangetsu, justo donde recordaba haberse dormido, estaba bastante exaltada por aquella pesadilla y todavía brotaban algunas lágrimas de sus ojos, apenas despertar lo primero que hizo fue secar sus lágrimas y bajar de la cama en la que dormía, para que segundos después la puerta de su habitación se abriera y alguien más entrara.

— ¡Buenos días Seki!, Oh bueno, veo que ya estás despierta — Dijo Hoshi con mucha alegría entrando a la habitación — el desayuno ya está servido, ven a comer.

La luxray salió de la habitación y se dirigió al comedor, mientras que la vulpix, aun pensando en su pesadilla, fue tras la pokémon eléctrica, bajando al comedor en el cual, a parte de la luxray, se encontraban Shine, Amai y Mangetsu, quienes esperaban por la tipo fuego para empezar con su comida, Seki fue saludada por sus compañeros de equipo, más seguía tan inmersa en sus pensamientos que no respondió, simplemente se sentó y comenzó a comer pues, aunque no tenía mucho apetito, recodo que Hoshi le había dicho que no se volvería fuerte sino comía adecuadamente, sin embargo, al pensar en esto, una idea pasó por su mente.

— Oigan... ¿Cómo se hace eso de "ser fuerte"? — Preguntó la vulpix sorprendiendo levemente a todos los presentes, pues por su silencio de los días anteriores no esperaban que hablara tan de repente — Anoche Hoshi dijo que ser fuerte no era solo usar ataques fuertes o atacar todo el tiempo, pero entonces... ¿Qué es ser fuerte?

— Es una pregunta interesante... Yo creo que ser fuerte no es solo centrarse en el físico, ser fuerte es tener equilibrio — Respondió la luxray ante la pregunta de joven su estudiante — la fuerza bruta por sí sola no sirve tanto como muchos piensan, si alguien quiere ser fuerte de verdad, también debe ser listo, rápido y astuto, solo así se puede ser realmente eficiente en combate.