LA VIDA DE MÉXICO

Seamos amigos

Seamos amigos

Nueva España.

Ya ha pasado una semana desde que nuestras incómodas visitas llegaron, a decir verdad e empezado a acostumbrarme a sus indirectas, soy amable por obligación ya que no me queda de otra y eso porque apenas hace unos días me enteré que tendré unos acuerdos comerciales con las colonias de dichos imperios, así que debo de mantenerme serena para tener un tratado justo para que los seis nos beneficiemos de manera igualitaria y si SEIS ya que nuestros padres tomarán la mayoría de las ganancias y nosotros solo una parte.

Me encuentro lavando los platos hasta que siento a alguien detrás de mi pero no le tomo importancia así que me concentro en seguir lavando.

—Tengo entendido que el deber de las princesas es ir a clases que solo les asignan a ustedes para ser mujeres ejemplares y dignas de tener una corona, además de que las princesas suelen ser mimadas y perezosas que no hacen otra cosa más que preocuparse por sus vestidos.

Este quién se cree que es.

—Mire príncipe Trece Colonias yo no soy como las demás y usted no es nadie para jugar a mi perso.....

—No estoy diciendo que este mal princesa, simplemente estoy expresando lo que me han enseñado, usted es tan diferente al resto.

—¿Que se le ofrece?

—Nuestros padres desean vernos.

Termine de lavar los platos que me restaban y me dirigí hacia la sala principal dónde se encontraba mi padre y los otros dos imperios juntos a Trece Colonias en total silencio, al abrir la puerta N.Francia ya se encontraba.

—Buen día, ¿Necesitan algo?

—Claro, necesitamos hablar con los tres, tomen asiento.

—Haremos un baile para celebrar el nuevo acuerdo que tendremos, será en tres semanas.

Algo que he descubierto en estos días es que la señora Francia le gusta decir las cosas sin rodeos, le molesta cuando alguien se extiende y ella termina diciendo todo, en ocasiones me molesta.

—Asi que a partir de este momento comenzarán a ir a clases de baile, no solo estaremos presentas nosotros, vendrá gente importante de el continente europeo y la gente más importante de estás tierras claro —El señor UK siempre firme y seguro de si mismo.

—Es todo, regresen a sus actividades.

—Si padre.

Y salí de ahí, no soporte estar más tiempo en ese lugar, me sentía realmente incómoda, antes de cerrar la puerta escuché al príncipe Trece Colonias.

—Disculpen pero yo no estaba haciendo absolutamente nada, ¿Que se supone....

No esperé a que terminara, cerré la puerta casi de inmediato, no me quiero ver como una completa chismosa, además de que su comportamiento no me agrada en lo más mínimo, me dirigí de inmediato a la cocina, una vez limpios todos los platos fui a la sala de música para tomar la clase de 3 horas.

Al terminar me dirigí a danza, que son prácticamente dos horas. Siempre suelen darme 5 minutos de descansó.

Después de comer, casi al anochecer fui al jardín un rato, para despejarme y se me bajarán un poco la comida, he estado usando vestidos sencillos pero con un corset que prácticamente te mata, así que decidí salir para por lo menos para poder respirar.

—Buenas noches.

—Aun son tardes, príncipe Nueva Francia.

—Bueno está por anochecer, así que ya contaría como noches ¿no cree?