09

1.2K 117 10
                                    

[Quiero aclarar que el capítulo anterior era un especial, no tiene nada que ver con la historia oficial]

Los tres se encontraban en silencio mientras que el taxista sentía un aura peligrosa, sudando rezaba que su casa no fuera lejos, paro el auto viendo una casa algo grande y con rapidez bajo del auto sacando los bolso en la puerta, apenas los tres salieron el taxista aranco dejando un polvo por detrás --que bonita-- susurro souta con brillos en sus ojos, le hubiera encantado que su hermano lo viera pero una idea paso por su mente --¿nos podemos sacar una foto?-- pregunto con entusiasmo mientras buscaba su celular pero se mostró confundido cuando no lo encontró --¿no estarás pensando usar esa mierda cuando nos tienes a nosotros, verdad?-- pregunto ran con una sonrisa mientras abrazaba a souta --no, quería mandarle una foto a nahoya para que viera que estoy bien y avisarle que me quedaré con ustedes-- una sonrisa se les escapo a los dos mayores, que souta dijiera que se quedaría con ellos una chispa paso por todo sus cuerpos alegrando a los dos, rindou rápidamente agarro el celular y lo levanto, acercó a souta en medio de los dos e hizo que ran pusiera su brazo alrededor del hombro del menor mientras que el abrazaba su cintura, souta miró a la cámara sorprendido y así se capto en una foto, el hermano menor mostró la foto con una sonrisa para después enviársela al gemelo del kawata, guardo el celular en su bolsillo sin que souta se diese cuenta y empezaron con una charla trivial.

Los tres se miraron y se empezaron a reír, tomaron sus cosas para entrar a la casa, souta ordenando sus cosas mientras que los hermano haitani fueron a la oficina del mayor a terminar unos trabajos pendientes.

Ya con la ropa guardada souta exploro a su alrededor, sorprendido por lo enorme que era cada habitacion, pasando cerca del comedor se escucharon voces femenina y esto inquieto al menor. --¿Realmente trajeron un chico? Lo lamento por el-- con melancolía hablo una de las chicas --Supongo que el chico no los conoce bien, yo lo vi y es muy tierno, tiene el pelo esponjoso! Espero que los jefes lo traten bien..-- suspiraron las dos con preocupación, siguieron hablando de cosas triviales dejando el tema en el aire, souta había quedado confundió ¿conocerlos? El los conocía muy bien, con los cachetes inflados y el ceño más fruncido que de costumbre entro al comedor sorprendiendo a las dos jóvenes quienes vestían como sirvientas, estas le quedaron viendo sorprendido y fue ahí cuando su coraje se esfumo -- ah, h-hola.. em, yo quería, no.. yo estaba eh, donde esta la cocina?-- Hablo con nerviosismo jugando con las manos, las muchachas sonrieron con ternura --Por esa puerta pequeño ¿tienes hambre? Te puedo cocinar, si eso quieres-- abrió la puerta dejando ver una enorme cocina algo lujosa --No, yo en realidad quería c-cocinar la cena ¿puedo?-- pregunto viendo al suelo, sintió una mano en su cabello haciendo que mire a la dueña de la mano --Por supuesto, si necesitas ayuda llámanos!-- Sonrió amable, este correspondío el gesto y se dirigió a la heladera.

El mayor de los haitani se estiro mientras suspiro, trabajar le era cansador y ya no quería seguir --Ah! Ya me aburrí, rin sabes cuando falta para la cena?!-- grito haciendo salir a su hermano del baño que tenia en su oficina, frustrado se rasco la nuca intentando contener las ganas de golpear a su hermano mayor --Deja de gritar idiota, no tengo idea ¿acaso kyoko no te aviso?-- se sentó en el sillón que había cerca del escritorio de Ran --Dios! Esas idiotas no sirven para nada ¡Kyoko, Kazumi!-- en par de segundos las dos chicas aparecieron por la gran puerta haciendo una reverencia mientras temblaban --Díganos señor Haitani-- aún con la cabeza baja hablo Kazumi --¡¿Le estoy pagando para que estén de idiotas o porqué mierda no dicen si la cena esta lista ya?!-- se levantó bruscamente golpeando el escritorio haciendo saltar del susto a las dos jóvenes --Lo sentimos señor Haitani pero no sabemos nada de la comida-- Kyoko hablo mientras apretaba ligeramente su falda con miedo --ah? Entonces quien carajo crees que hará la cena?! No sabía que teníamos una maquina que hacía comida automáticamente-- grito con sarcasmo parándose enfrente de las dos chica que eran un manojo de nervios --El joven Souta decidió hacer la cena, nos cerró la puerta así que no sabemos cuándo estará la cena-- Kazumi tomo la palabra mientras agarraba la mano de Kyoko --Angry?-- preguntaron los dos haitani saliendo rápidamente de la oficina, golpeando la puerta de la cocina desesperados, se escucho un pequeño grito y después de unos minutos la puerta fue abierta dejando ver a souta con la mano mal vendada, este Sonrió dejando pasar a los mayores pero estos se acercaron a menor viendo la mano herida --¡Souta! ¿Que te paso, te cortaste? ¡Kazumi, trae el puto botiquín de inmediato!-- grito ran desesperado, apenas aparecieron las dos chicas el mayor de los haitani golpeó a las dos pronunciadas.

⚠︎una perra en celo⚠︎ |TR|➪haitangryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora