En un mundo egoísta el egoísta triunfa

Una aventura mal

Siento que no escribo hace mucho tiempo, han pasado muchas cosas que he preferido omitir por vergüenza, sí, cometí errores que en su momento hicieron que me arrepienta pero ahora las veo como una enseñanza y no hay forma de volver a repetirlo. Para resumirlo, un día salí con mi hermana, le pedí que me acompañe a recoger un vestido en Surco y quedamos en que ella se vería con su amigo mientras yo estaba con el mío, todo bien hasta allí, el problema fue cuando un mensaje que me llegó al celular hizo que yo cambie de planes, habíamos quedado en regresar a casa ese día pero no fue así, mi hermana se quedó con su amigo estando drogada y yo me fui a ver a otro amigo, obviamente me aseguré que ella iba a estar bien con él para yo poder irme tranquila. Al siguiente día ella tuvo que ir donde yo estaba porque yo tenía en la cabeza de que si habíamos salido juntas entonces debíamos salir juntas, grave error, ese día ella conoció a un amigo mío que en verdad me cae bastante bien, solemos marmotear hace dos años en su casa ya que vive solo. Ese día ella llegó y la conexión que ambos tuvieron fue muy fuerte que sí, sinceramente me dio mucho celos, pero como siempre, no dije nada, mi actitud fue la que habló por mí; de estar hablando y ser parte de ellos, de pronto me callé, me acosté y no volví a decir nada excepto cuando ellos me hacían preguntas como "¿Estas bien?" "¿Pasó algo?" etc, etc. Yo les decía que sí, pero era obvio que no, me sentía incómoda y decir que estaba un poco celosa me parecía tonto, al fin y al cabo eran dos humanos conociéndose uno al otro pero no pude, él le hacía cumplidos a ella que a mí nunca me hizo, me sentí rechazada y me resentí, ese día la pasamos juntos y pensaba volver a casa pero se nos hizo tarde por quedarnos dormidos todos y esa noche follé con él de manera no tan notoria según yo pero mi hermana no es tonta, nos veía y se reía y eso le prendía a él, no voy a negar que eso me gustó a mí también pero seguía sintiéndome mal. Ese día no pasó nada entre ellos y me refiero a algo sexual obviamente. Él durante todo el tiempo que estuvimos juntos los tres, tiraba indirectas sexuales y a mí me quedó claro que quería con ella también. Lo peor era que ambos tenían sus números telefónicos y eso no dejaba de dar vueltas en mi cabeza, se verían otro día sin yo saberlo y eso me enojaba, no podía hacer nada, ya la había cagado al aceptar que ellos se conozcan. Ese día me despedí de una manera muy cortante de él y en el carro casi no hablé con mi hermana, con ella no estaba enojada, ella no tenía la culpa de nada pero sé que una santa no es y mi cabeza no dejaba de hacerse mil novelas entre ellos. 

El 14 de Febrero volvimos a salir pero con un amigo que ella ya había conocido años anteriores así que normal, se podría decir que la pasamos bien, pero al siguiente día ella no quiso volver a casa (era obvio que quería ir a ver a mi amigo con el que había conectado muy bien y no me di cuenta en ese momento), fuimos a hacer hora al departamento de otro amigo mío y marmoteamos hasta las 4pm, luego nos fuimos a la casa del susodicho a pedido de mi hermana, llegamos y mi actitud nuevamente fue la misma de antes, se drogaron, bebieron vino, comieron, yo no fumé con ellos, no quise, solo bebí un vaso de vino y nada más, sentía que sobraba pero no podía hacer nada, nuevamente la había cagado al aceptar ir allí con ella pero ya era demasiado tarde, esa noche pasó lo que tanto temía entre ellos, la pasaron bien pero yo todo lo contrario, desde entonces no sé si ellos se habrán vuelto a ver porque siento que si se lo pregunto a ella me va a mentir, tampoco volví a escribirle a él.

Han pasado cuatro semanas desde entonces y hace cuatro días él me escribió diciéndome que sigue sin entender mi actitud de esas noches, que le gustaría hablar conmigo. Le respondí al día siguiente aceptando hablar con él. Aún no acordamos el día ni la hora, no sé si se llegue a dar, lo que sí se es que sigo sin poder expresarme bien, no soy capaz de decir como me siento en el momento exacto, me guardo cosas que debo decir pero siempre se me hace un nudo en la garganta y dejo que se me pase, me hace daño y no debo seguir siendo así, es una herida que debo sanar porque sé que todo viene de infancia, lo bueno es que lo reconozco, ahora debo trabajarlo. 

Bien dicen que de los errores se aprende.