-36-

14 2 0
                                    

𑁋Maldito pajarraco, ¿en dónde diablos estabas?. Si crees que... 𑁋pero el recién llegado frenó por completo la palabrería que se avecinaba.

𑁋Simplemente se me ha hecho un poco tarde porque el Maestro me ha llamado de imprevisto 𑁋. Respondió secamente mientras removía con su pico sus plumas. Debajo de ellas, una bolsa del mismo color que su plumaje contenía una carta un tanto arrugada, esta le fue entregada directamente al Toxicroak, quien la tomó con extrañeza en su mirar𑁋 Dijo que debía entregarte esto de inmediato.

Los ojos de Praxedes abandonaron la figura de Torf para volver la atención hacia el papel en sus manos, le quitó el sello y tomó la hoja, leyendo el contenido con sumo cuidado. Su expresión facial permaneció estoica en todo momento, pero después de terminar la lectura arrugó con fuerza el papel.

𑁋Si así lo quiere el Maestro... 𑁋el enojo en su tono era evidente, así como el gran esfuerzo que estaba haciendo para no explotar por la ira𑁋 entonces, que así sea 𑁋. Exclamó finalmente, soltando un suspiro derrotado.

𑁋Silas, entregame a la niña 𑁋pidió sin más.

El Trevenant hizo desaparecer la jaula que me mantenía cautiva con la intención de entregarme a su Jefe, pero no les permití continuar. Tomando valor de quién sabe dónde, utilicé Teletransporte, situándome frente al río que acabamos de cruzar.

𑁋Maldición, ¿qué están esperando?... ¡Atrapenla! 𑁋.

Corrí con el corazón en la garganta. Tenía tanto miedo y justamente en ese instante lleno de adrenalina, fue que caí en cuenta de todo. A pesar de las dudas que buscaban acabar con cualquier vana esperanza que me quedara, yo seguía teniendo cierta añoranza por terminar con toda esa pesadilla y regresar al lado de mis seres queridos.

Por eso me había movido al más mínimo chance de escapar, por eso corría con el corazón latiendo a mil por hora y por eso mismo me negaba a aceptar la cruda realidad que me rodeaba... era una simple niña incapaz de salvarse a sí misma.

𑁋¡Te tengo mocosa! 𑁋.

Grité asustada al ver a Praxedes detrás mío, quien sin pensarlo dos veces, me atrapó con ambas manos sin escatimar en la fuerza que empleaba para sujetarme.

𑁋¡¡Suéltame!! 𑁋.

Dejé que toda la desesperación saliera como una súplica inconsciente para que todo culminará de una buena vez. Las manos de mi raptor me estrujaban con rudeza, impidiendo que el aire pasara fluidamente por mi sistema respiratorio hasta llegar a mis pulmones. De seguir así, pronto acabaría en la inconsciencia.

𑁋Por favor... que alguien me ayude... 

"El Milenio Pokémon"/ 1ra TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora