[ JJK ] Blood Ink ✔️ TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL

73: Hundimiento Del Sol [Capitulo Final]

No pasa mucho tiempo antes de que Jungkook se duerma, agotado por el esfuerzo físico y emocional de los últimos días.

Su cabeza descansa sobre mi pecho, con los brazos cruzados sin apretar. Sus ojos parpadean bajo los párpados finos como el papel que los cubren, sombras que profundizan en su hundimiento. Se mueve con inquietud, retorciéndose en su sueño.

Luego, con un gran suspiro, se queda completamente quieto.

Al estar tan profundamente dormido, me detengo un minuto para asegurarme de que sigue respirando uniformemente.

Me desenvuelvo con suavidad y vuelvo a recostar su cabeza tan suavemente como puedo. La almohada se arruga bajo su pelo de ébano.

Agradecida de que duerma como un muerto, me deslizo fuera de la habitación con pies silenciosos, moviéndose por la alfombra.

Avanzo por el pasillo vacío, dirigiéndome a la habitación oscura de Taehyung. Antes de que pueda llegar, la puerta se abre con un chirrido y deja ver una figura esbelta y desplomada.

Jimin.

Él levanta la vista cuando me acerco. Las dulces curvas de su rostro son delgadas y ojerosas, pero la parte más difícil de ver de él son sus ojos.

¿Eres soy yo o siento que las hermosas galaxias que solían brillar en los ojos de Jimin han sido tragadas por agujeros negros?

De todos modos, él se esfuerza por sonreír para mi.

Es vacía y plana.

Sin palabras, le tiendo la mano.

Jimin se acerca, envuelve su mano alrededor de la mía y tira de mi hacia las escaleras.

"Vamos, preciosa diosa," dice.

Bajamos juntos las escaleras.

Encontramos a los demás afuera, sentados uno al lado del otro en el camino frente a la casa, mirando al mundo.

No dicen nada.

Sólo existen.

Jimin suelta mi mano para sentarse al lado de Namjoon, que observa con nostalgia cómo un pájaro pasa flotando en una corriente de aire. Yoongi está a su lado con una rodilla doblada hacia arriba, con las manos envueltas alrededor de su delgado tobillo.

Me siento entre Jin y Hoseok y apoyo la cabeza en el hombro de Jin.

Es muy extraño.

Recuerdo haberlos visto por primera vez, allí, al otro lado del cristal de una tienda, envueltos en humo y sombras como seres míticos.

Ahora los miro, raspados, magullados y rotos, y tan humanos, pienso que el mundo en el que existen no es diferente del mío.

Son lo mismo que yo.

Nunca fuimos diferentes.

Sólo era cómo los veían mis ojos, cómo los imaginaba mi mente, cómo los encajonaban mis prejuicios. Ahora son míos, sin el peso de las expectativas - reales y crudos.

Cierro los ojos y existo con ellos.

Después de un rato, Hoseok me pasa una mano tranquilizadora por el hombro.

"¿Cómo están?" pregunta.

"Durmiendo," responde Jimin. Yo asiento con la cabeza.

Ahora todos estamos mirando al mismo pájaro, planeando en el aire. Sus plumas brillan bajo las tenues luces cambiantes del atardecer, negras y erizadas.

Es libre y no tiene límites.

"Vamos a estar bien," dice Namjoon en voz baja.

Giro la cara hacia arriba, captando los últimos rayos de sol en sus pómulos.