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El celo de JiMin había empezado hace unos pocos minutos y la verdad, hasta aquí duro el enojo se este.

Ni siquiera espero a entrar en el calor de su hogar para follarse a su esposo, no.

Ambos se desnudaron en el auto mientras se manoseaban desesperadamente, y es que a ellos nunca les importo el lugar o el momento, y menos si alguien los veía, ahora no iba a ser la excepción.

— chúpamela.— dijo YoonGi mientras se baja el boxer.

— el celo es mío, chúpamela tu, no seas cabron.— dijo el Omega haciendo que el alfa riera.

YoonGi sin perder mínimo de tiempo empezo a besar el cuerpo desnudo de su esposo, besaba su cuello pasando justo donde estaban las glándulas de el olor, fresas, dulce y excitante aroma. Sus besos siguieron bajado por las clavículas y luego se detuvieron en sus pezones, los cuales lamió y mordisqueo a su antojo.

— S-sigue.— gimió JiMin desesperado.— baja más... Ahh.

YoonGi iba a hacerlo con calma, quería disfrutar de el cuerpo de JiMin, hacia casi dos meses que no follaban, tendría calma.

Los tortuosos besos húmedos continuaron por el abdomen de JiMin, YoonGi chupaba y besaba todo a su paso, pero estar en el auto era incómodo para hacer bien el trabajo.

— entremos a la casa.— dijo YoonGi cuando estubo justo enfrente de el pene de JiMin.

— Joder!!.— chillo el Omega frustrado.

Y como si la vida les importara una mierda, ambos salieron de el auto desnudo, YoonGi cargaba a JiMin como un koala mientras esté besaba su cuello y arañaba su espalda, los guardaespaldas que siempre cuidaban la casa desde afuera, solo se taparon la nariz evitando oler a el Omega en celo y voltearon la cara para otro lado, evitando la imagen de sus jefes desnudos.

YoonGi camino desnudo con el cuerpo de JiMin encima por el corto camino que dejaba el auto a la puerta de la gran mansión, caminaba con una erección sin pena alguna, dejando ver el hermosa trasero de su esposo que solo él se follaba.

Abrió con algo de dificultad la puerta de la casa e ingreso con JiMin aún encima, el Omega estaba realmente necesitado.

Como era el medio día, la casa estaba llena de empleadas, unas en la sala, otras en la cocina y unas pocas en las habitaciones, cuando YoonGi y JiMin entraron la casa se llenó rápidamente de sus aromas, Romero y Fresas, haciendo que las empleadas en su mayor cantidad Omegas chillaron, las que estaban en la sala, se quedaron paralizadas por la pornográfica escena que estaban haciendo los jefes.

— fuera de aquí!!.— gruño JiMin furioso, cuando vio como estás veían a su alfa con deseo, bajo de encima de su esposo.

Las pobres empleadas corrieron hasta el segundo piso, todas sabían que cuando los esposos Min estaban en celo, lo mejor era no estar en la casa, o simplemente encerrarse en la habitación de servicio y eso hicieron.

YoonGi rio por ver a JiMin celoso.

— ¿de que te ríes?.— dijo el Omega molesto mientras miraba la enorme erección de su esposo y imaginaba varias cosas nada castas.— follame aquí.

—¿No querías que te la chupara?.— pregunto el alfa burlón.

— maldita sea!!.— chillo el Omega molesto.

YoonGi amaba hacer que JiMin rogara por sexo cuando estaba en celo, eso lo excitaba más.

— ¿Que quiere? Pídelo.— dejo el alfa viendo el cuerpo desnudo de su esposo.

Hijo de la mafia M.Y'G  P.J'MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora