En la repisa

EL VECINO

MIÉRCOLES 12:32

Durante el almuerzo, Sam se sentó solo en su mesa por un rato, esperando que su amigo Lucas se uniera a él cuando vio a su hermana caminar en su dirección. Ella le sonrió, sentándose.

"Oye. ¿Qué pasa?" preguntó ella.

"Poco. Solo esperando a que apareciera Lucas". Miró alrededor de la cafetería. Pero Lucas no estaba por ningún lado, en cambio, los ojos de Sam captaron a Bradley haciendo fila para comer. Al contacto visual, Brad sonrió y lo saludó con la mano. Sam un poco desconcertado por que solo logró esbozar una pequeña sonrisa y rápidamente se volvió hacia su comida.

"¿Qué pasa?", preguntó su hermana. Sam la miró.

"¿Qué quieres decir?"

"Estabas mirando alrededor del lugar y luego vi que te sonrojaste ..." ella lo miró de una manera divertida. "¿Qué te hizo sonrojar?"

"¿De qué diablos estás hablando? No me sonrojé".

"Ah, ¿así que ahora me estás diciendo que estoy equivocado?"

"Haley, ¿podemos seguir adelante? ¿Qué vas a hacer más tarde hoy?"

Ella agitó su dedo hacia él triunfalmente. "Ah, ya veo lo que estás tratando de hacer. Cambia de tema para que no descubra el verdadero problema, ¿eh? Bueno, de hecho, voy a ir al cine, acaba de estrenarse la nueva película de Kingsman, así que me preguntaba si podríamos pasar el rato con un buen hermano y hermana esta noche".

Sam la miró con los ojos entrecerrados antes de finalmente decir: "Haley, ¿qué quieres?".

"¿Qué?", ​​preguntó inocentemente.

"¿Por qué querrías ir al cine conmigo de todas las personas? ¿No tienes esas molestas y risueñas chicas en tu clase con las que pasar el rato?"

"Uf... te invito, eso es lo que importa. ¿Por qué tienes que darle tanta importancia?", dijo irritada. "Sé que te gustó la primera película, así que pensé por qué no...".

"No puedo ir esta noche, ¿de acuerdo?" interrumpió Sam.

"¿Qué vas a hacer hoy entonces?"

"Estoy pasando el rato en casa de Sophia".

"Oh ya veo. Estar a salvo."

"Hola, Sam". Bradley se sentó a su lado. Sam no esperaba que el chico nuevo se uniera a él en el almuerzo, pero no se sorprendió de todos modos. El único conocido de Bradley en ese momento era Sam.

"Hola", dijo. Haley miró a Bradley de manera enamorada.

"Hubba-hubba", se lamió los labios. "Sam, ¿no me presentarías a este bombón de aquí?". ella le dio una mirada significativa. Sam miró a su hermana asombrado de lo vergonzosa que a veces podía ser.

"Bradley, conoce a mi estúpida hermana Haley". finalmente dijo.

"Bradley", le apretó la mano.

"Haley. Haley Robinson", le sonrió.

"Encantado de conocerte, Haley", dijo.

"Igualmente." Le guiñó un ojo. Sam puso los ojos en blanco.

"Haley, puedes soltar su mano ahora", le recordó.

"Oh, lo siento", se disculpó. "Qué tontería". ella se rió. Sam negó con la cabeza hacia ella.

"¿Cuántos años tienes?", le preguntó Bradley a Haley.

"Diecisiete", dijo. Bradley asintió mientras comenzaba a comer.

"¿Estás soltero?", preguntó Haley. Bradley dejó de comer de repente y la miró. Sam no podía creer lo que escuchaba.

"Haley, ¿podrías simplemente parar...", comenzó.

"¿Parar con qué?"

"¡Me estás avergonzando!"

"Bueno, entonces supongo que estoy haciendo un gran trabajo como hermana", dijo triunfalmente.

Bradley sonrió. "Soy soltero".

"Ves..." Haley señaló a Bradley. "A él no parece importarle la pregunta. Es solo una pregunta ordinaria que hice".

Sam miró estupefacto a Haley. "Preguntarle a alguien sobre su edad como lo hizo Bradley califica como ordinario, lo que hiciste fue inapropiado. Ni siquiera lo conoces".

"Sí, bueno, eso es lo que hace la gente, Sammy. Hablan, se conocen. Si no preguntas, nunca se sabe".

Sam suspiró con resignación. Comieron en silencio durante un rato.

"Entonces, ¿dónde vives, Bradley?", continuó Haley.

"Uh, tenemos un apartamento en la calle Ronan".

Haley abrió la boca en estado de shock. Intercambió miradas con Sam quien también parecía sorprendido por el hecho.

"¿Qué?" Bradley miró de Sam a Haley.

"También vivimos allí", explicó Sam.

"Eres como un vecino prácticamente", dijo Haley emocionada. "Tal vez podrías hacernos una visita algún día, ¿quieres?"

"Uhm, sí... ¿Si eso le parece bien a Sam?" Bradley lo miró. Sam asintió.

"Sí, en cualquier momento, amigo. Eres bienvenido a mi casa".

"Pero tal vez más tarde, no ahora. Nos acabamos de mudar y estamos ocupados empacando cosas, así que..."

"Sí, seguro amigo. Puedo mostrarte el vecindario cuando estés libre", dijo Sam.

Haley les sonrió a los dos. Sam le lanzó una mirada de reproche.

"Estoy tan contenta de poder verte más a menudo", le sonrió a Bradley. "Honestamente, no hay suficientes chicos sexys en nuestro vecindario, así que eres una adición bienvenida".

Sam sacudió la cabeza hacia ella con incredulidad. "Haley..."

"¿Qué?"

"Mantenlo en tus pantalones."

"¡Uf!", ella puso los ojos en blanco. "Está bien, chicos. Los dejo". se levantó de la silla, asegurándose de que sus senos fueran muy visibles cuando se inclinó para recoger su bandeja.

"Me gusta tu collar. Es muy bonito", dijo Bradley.

"Oh", tocó el collar de oro que tenía puesto en señal de reconocimiento. "Sí, mi papá me lo dio como regalo de Navidad".

"Me gusta." Dijo.

"Muchas gracias", dijo con un poco de entusiasmo, mirando a Bradley de una manera extraña y soñadora. Me alegro de que no seas como el resto de ellos". dijo y se fue. Bradley y Sam la vieron irse, Sam todavía negaba con la cabeza completamente avergonzado.

"Disculpe el comportamiento excéntrico de mi hermana. Se cayó de cabeza cuando era un bebé".