¿Qué pasaría si?

El final de la villana no es la muerte sino la redención

¿Qué pasaría si?...

¿La reina es la causante de la desaparición de Ivonne y la madre de Penélope paga los platos rotos?

¿Penélope seguira el camino de la venganza o su encuentro con el príncipe heredero frenará su deseo de venganza?

El final de la villana no es la muerte sino la redención.

El comienzo de esta historia, muchos de ustedes lo saben. Sino, ni modos. Para quienes no lo conocen, esta historia inicia con una protagonista, Ivonne Eckart, la hija menor del duque Eckart y la única princesa del imperio. Ella, quien creció rodeada de un padre preocupado por ella, dos hermanos mayores de caractes singulares que a su peculiar forma le demuestran cuanto la aman. Ella, quien repentinamente desapareció en un festival por motivo de la fundación del imperio. Ella, quien no volvió a casa, vagando por las calles, llorando en rincones su mala suerte.

Pero cierto día, como por arte de magia, encontró una mano amiga. ¿Su nombre? Emilia. Ella, una joven adulta, de belleza deslumbrante y mirada amable, le tendió la mano y le ofreció techo y comida. Ivonne, lo suficientemente hambrienta como para aceptar un pan duro, el gesto desinteresado de Emilia le conmovió. Y así, el destino de Ivonne se cruzó con el destino de Penélope, la hija de Emilia. Penélope, una niña fisicamente parecida a su madre, miró a su nueva compañera de juegos con una expresión de curiosidad, posteriormente le sonrió de vuelta, tomó su mano y le mostró un nuevo mundo, totalmente desconocido para Ivonne. Ella quedó maravillada por la vida sencilla de madre e hija. Pero la felicidad, no duró para siempre.

Cierto día, la puerta se abrió de repente y los soldados de la familia Eckart invadieron la casa de Emilia y Penélope. Encabezados por Derrick Eckart, el hijo mayor de la familia Eckart y futuro duque, juzgó cruelmente a Emilia y Penélope. Ivonne, bañada en lagrimas, le suplico a su hermano de rodillas y pidió por su perdón. Derrick hizo caso omiso a las suplicas de su hermana menor, tomando con su espada la propia vida de Emilia frente la mirada de Penélope e Ivonne. 

Derrick, fríamente tomó a Penélope de la mano e Ivonne nunca más volvió a verla. Suplico y suplico por su paradero y su hermano le respondía cruelmente, expresando una y otra vez diferentes formas en las cuales “dio muerte a aquella perra”. Ivonne, cada vez más se hundió en la tristeza, suplicando a Dios una y otra vez que volviera a ver a su amiga.

Los años pasaron y pasaron. Derrick se volvió un noble intachable. Reynold, el segundo hermano, el jefe de los caballeros de la familia Eckart. Ivonne, por el contrario de lo que se esperaba de la hija menor de un duque, actuo imprudentemente una y otra vez frente a la nobleza, en un cruel intento por llamar la atención. 

Desesperada, buscó al príncipe heredero en busca de ayuda. Callisto Regullus, apuntando a su garganta, pidió razones de su actuar. Ella le explicó su cruel historia. Con lagrimas en los ojos, se humillo frente a un miembro de la nobleza con tal de encontrar a su amiga más querida. Callisto, harto de su comportamiento, llamó a un caballero para que retirase a la princesa de su presencia. El caballero llegó y las lagrimas de tristeza fueron sustituidas por lagrimas de felicidad. El caballero era nada más ni nada menos que Penélope, su amiga más querida.

“Penny yo...”

“Saludos a la princesa Eckart del imperio Ioka... Mi nombre es Penélope, el caballero escolta de su alteza real príncipe heredero, Callisto Regullus”

Ivonne entonces comprendió al escuchar el tono de voz de su amiga. Derrick, su hermano mas querido, la lastimo de una forma en la cual jamás obtendrá su perdón. Con lagrimas en los ojos, Ivonne suplicó su perdón. Penélope le ignoró y Callisto le ordenó llevarla al ducado. Penélope accedió y llevó a Ivonne al ducado. En todo el camino, Ivonne lloró y maldijo a su hermano bajo la mirada de Penélope. 

Como caballero, llevó a Ivonne a su destino. Fue recibida por la familia Eckart. Derrick, aterrado, expresó su crimen frente a su familia. Confesó haber violado, torturado y herido de muerte a Penélope. Ivonne, aterrada, miró a su amiga sonriendo cruelmente como una villana. 

“La próxima vez que quieras asesinar a alguien, joven duque. Asegurate de que sea el culpable”

Con una mirada fría, Penélope arrojó papeles al suelo. Con manos temblorosas, Ivonne tomó los papeles y comenzó a leerlos. El crimen de la desaparición de la princesa Eckart, Ivonne; crimen por el cual Emilia pagó con su vida de igual forma que Penélope. 

“Como la princesa Eckart puede ver en ese informe... Los culpables de su desaparición y posible asesinato son la reina y el segundo príncipe” admitió Penélope “Mi madre y yo fuimos contratadas por el príncipe heredero para encontrarte y cuidarte” confesó Penélope.

“¿Por qué?” preguntó Ivonne, con lágrimas en los ojos.

“... Por que la princesa es el contenedor perfecto de Leila” sonrió Penélope “por ello la reina y el segundo príncipe la alejaron de su familia” simplificó Penélope.

“¡¿Por qué revelar esto ahora?!” gritó Reynold.

“El joven duque invadió mi hogar y asesino a mi madre bajo los cargos que cometió la reina y el segundo príncipe” pausó “lo justo es pagar su deuda, ¿cierto?” embozó una sonrisa vacía.

“¿Quieres mi vida?” preguntó Derrick, mirandole fríamente.

“¿De que me sirve tu vida?” preguntó Penélope, frunciendo el ceño “Destruiste mi cuerpo, ¿lo olvidaste?” embozó una sonrisa fría “Quiero venganza contra la reina y el segundo príncipe” dio media vuelta “Apoyare al príncipe heredero como emperador. Duque, jovenes Eckart... Espero su cooperación o haganse a un lado” sentenció Penélope y miro a Ivonne por un instante “... Cuidate Ivonne” le sonrió cálidamente.

Derrick abrió los ojos, sorprendido. ¿Por qué a él no le dedicó una sonrisa como aquella? Apretó los puños, forzandose a sí mismo a no ir tras ella y permanecer en su lugar. Se forzó a sí mismo a ver partir a aquella doncella plebeya que capturó su corazón. Se forzó a sí mismo a no tomar su cuerpo y esconderla de todo el mundo en la privacidad de su habitación. 

“... Hermano Derrick” Ivonne miró a su hermano fríamente “no te atrevas a decirme más hermana... Ya no somos familia” sentenció Ivonne, partiendo tras Penélope sin mirar directamente a su hermano. 

“Ivonne espera por favor” el duque rompió el silencio “ayudaremos al príncipe heredero si es lo que deseas” admitió “pero no salgas por esa puerta” pidió el viejo padre.

Ivonne miró a su padre y después volteó a ver a Penélope. Ella le sonrió de vuelta y negó, indicandole con el gesto que permanezca en su hogar, que el destino se encargara de reunirlas de nuevo. Y así fue, después de mucho tiempo, batalla tras batalla, derramamiento de sangre inocente y no tan inocente. Ivonne y Penélope se reencontraron, como la emperatriz que jamás deseo ser y el caballero roto que recuperó a su amiga y cumplió con su venganza al asesinar con sus propias manos a la reina y al segundo príncipe. 

El final no es como lo muestra la obra original. No. El final llega no con la muerte de la villana, sino cuando olvidan el final de la villana. Penélope es la villana de esta historia, es cierto, pero no se dejó guiar por la envidia y los celos de la protagonista, no. Al contrario, se hizo su amiga y su caballero más fiel, demostrando ser alguien en el cual Ivonne pueda confiar. La villana, aquella que se interpone en el camino de la protagonista, demostró ser la unica en la cual puede confiar la protagonista, rompiendo todos los estereotipos de las historias en donde el final de la villana es la muerte. En este caso, el final de la villana no es la muerte sino la redención.

Fin.

¿Qué les pareció? 

La idea originalmente iba a ser un long-fic pero a final de cuentas se publicó como un solo episodio narrando a grandes rasgos lo sucedido. Si es lo suficientemente popular, puede y me anime a escribirlo como long-fic. Por ahora, solo es un episodio más de ¿Qué pasaría si? en donde todo puede suceder. 

Firma: Shaoran Uchiha de Nikaido.