Además de Annabelle, hay otra muñeca tan peligrosa como ella, que también está encarcelada en el Museo Warren de lo Oculto en Estados Unidos. Llamada Lily, la muñeca al estilo "Baby", es la única que también tiene una luz roja y una caja de madera solo para ella, ya que es tan maldita como la famosa Annabelle, pero no tan conocida. Algunos visitantes del museo aseguran que Lily es aún más sombría, porque, además de su aterradora historia, parece que sigue con los ojos a todos los que visitan el museo. Se dice en Monroe, en el condado de Fairfield, (donde se encuentra el museo) que poco después de la muerte de Ed Warren, Lorraine fue llamada para resolver el caso de una muñeca que había reaparecido en la casa de su antiguo dueño. Según la leyenda local, Lily fue enterrada con su dueño, pero parece haber regresado a casa después de siete días. La familia de la niña fallecida afirma que la muñeca logró copiar los rasgos de su hija después de su muerte. Como la niña no hablaba, la muñeca le fue entregada cuando tenía siete años y la única palabra que la niña dijo en toda su vida fue "Lily", por lo que la familia nombró a la muñeca con el mismo nombre. Cuando cumplió 9 años, la niña murió, cayéndose del tercer piso de la casa donde vivía. Se dice que ella subió al ático para mostrarle la vista a Lily y las dos cayeron en el jardín de la casa, esto a mediados de 1980. Luego del revuelo en el barrio, la niña fue enterrada con la muñeca y, siete días después, la muñeca. fue visto en el patio. La familia se quedó con la muñeca, pero se dieron cuenta de que la cara de la muñeca cambiaba cada vez más. Sin embargo, el rostro de Lily se parecía cada vez más al rostro de la hija fallecida de la pareja. La gota que colmó el vaso fue cuando la madre de la niña jura que vio a la muñeca mover los labios, tal como hizo la hija cuando aún estaba viva y quería decir algo.
Los padres no tuvieron más dudas y donaron la muñeca al museo. Lily fue colocada sobre una mesa y los informes aumentaron. Muchos visitantes afirmaron que Lily parpadeó y movió los labios, como para decir algo. Un sacerdote que visitó el museo afirmó que lo que estaba impregnado en la muñeca no era el espíritu de la niña muerta (del antiguo dueño, en este caso), sino un "espíritu inmundo", que quería que las almas de los niños pudieran venir al mundo de viva. La extraña historia no se detiene ahí. Como Annabelle, un hombre habría tocado a Lily y habría dicho que la muñeca estaba pronunciando su nombre. Solo él lo escuchó e incluso acercó la cara de la muñeca a su oreja izquierda. El otro día, después del episodio, el hombre fue encontrado muerto en el patio trasero. Los forenses concluyeron que se cayó del techo y se rompió el cuello, golpeándose el lado izquierdo de la cabeza contra el parapeto, todo esto en la mañana después de tocar a Lily. Las dos muertes fueron atribuidas a la muñeca y así fue como fue colocada en una caja de madera, con una luz roja para advertir a los visitantes que no se atreverían a tocar a Lily, para que no terminaran tan desastrosos como el de su antiguo dueño y el hombre que la tocó y la escuchó decir algo. Dicen que con solo mirar la foto de Lily es suficiente para que tu mirada penetre en tu inconsciente y puedas verla de noche, en casa, parpadeando y moviendo los labios, queriendo decirte algo.
