Confesiones

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Íbamos en un auto demasiado lujoso que solían usar los miembros de Bonten cuando hacían sus salidas, me encontraba en la parte de atrás con Sanzu a un lado y Rin en el otro, podía sentir una pequeña tensión por parte de Sanzu, el ambiente se había vuelto incómodo desde que Ran llegó a mi habitación e interrumpió a Sanzu.

Mientras nos dirigíamos al misterioso lugar pude notar que Mikey no se había presentado en todo el día.

-¿Manjiro estará en el lugar al que vamos?-pregunté, Sanzu ignoro mi pregunta.

-No, solo habrán algunos miembros de Bonten y también estarán Shinichiro y Wakasa.-informó Ran.

-No entiendo que tienen que hacer esos bastardos ahí-dijo Sanzu mientras miraba por la ventana del auto.

-Es el hermano del jefe ¿Que esperas?-está vez habló Rin quien se encontraba de copiloto escuchándo la conversación.

-Que más da... Solo iré a divertirme un poco.-siguió Sanzu.

-Ya lo creo, aunque a decir verdad... -Ran acerco su mano a mi pierna y comenzó a acariciarla.- Yo puedo divertirme en cualquier parte, no es necesario ir a ese lugar a hacerlo.

Al decir eso se encontraba demasiado cerca de mi cara, pasé saliva por mi garganta entendiendo a lo que se refería ya que subió aún más su mano y la pasó por entre el vestido negro que llevaba el vestido se comenzaba a subir a medida que Ran lo hacía.

-Ya veo-soltó Sanzu, al parecer había notado lo que Ran estaba haciendo.

Al cabo de unos largos minutos de trayecto habíamos llegado a lo que parecía el centro de Shibuya, las calles y todo el alrededor se iluminaba por las brillantes luces del lugar, pasamos por varias calles hasta que llegamos a un estacionamiento privado, el auto se detuvo y Ran abrió la puerta para poder bajar, luego baje yo a lo que el me ayudo y le sonreí calidamente.

Fuimos hasta un ascensor que nos llevaría hasta la sala central del gran edificio, estábamos en una especie de casino, bar y prostibulo, podía ver de todo un poco.

-¿Que es este lugar?-pregunté curiosa mientras me adentraba.

-El paraíso o el mismo infierno para otros.-me respondió Ran.

Podía ver demasiadas mesas de apuestas, mesas de billar, una barra de bebidas y también un centro de espectáculos en donde mujeres altas y de cuerpos atractivos comenzaban a bailar sobre un tubo.

-Tu podrías ser una de ellas, Asahi.-susurro Sanzu cerca de mi oido, Ran me había dejado sola para ir a buscar algo de beber y Sanzu aprovecho el momento.

-¿eh?

-Aún no he terminado contigo, pequeña traviesa-aparto un poco de mi cabello dejando mi hombro desnudo en donde dejo un pequeño beso.

-Entonces...-Ran volvió con dos vasos con un liquido color rojo el cual me pasó.

-¿Que es esto?-mire detenidamente el vaso, su color rojo intenso me llamaba la atención.

Sanzu soltó una pequeña risita y se cruzó de brazos.

-No lo bebas si no quieres morir aquí.-Sanzu se puso serio y vio como olía el vaso, tenía un fuerte aroma a alcohol y dulces.

-Pruebalo si quieres-hablo Ran.

Acerque lentamente el vaso a mis labios pero me fue arrebatado por Rin.

-Aquí-dijo ofreciendo un vaso de lo que parecía ser un jugo de frutilla.

-Ustedes par de imbéciles ¿Quieren que el jefe nos mate?-regaño a Ran y Sanzu quienes reian cómplices.

MY THREE DEITIES (𝐻𝑎𝑖𝑡𝑎𝑛𝑖'𝑠 𝐵𝑟𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟𝑠 & 𝑆𝑎𝑛𝑧𝑢) (+18) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora