Sentía como el sueño invadía todo mi cuerpo mientras el televisor reproducía un partido de básquet, mi novio Paul se removía del sillón cada 5 segundos, y hace 20 minutos que está parado frente a la pantalla dándome la espalda.
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-Paul, cariño baja un poco eso que no puedo dormir- dije en el tono más pacífico posible, y nada, no obtenía ningún tipo de respuesta. No tenía ganas de gritar, así que me levante y tomé el control por mi cuenta, apagando la tele. -Amor, ¿que pasa?, sabes que no me gusta que me hagas eso- mierda era tan adorable, pero estaba enojada, ni siquiera se dio cuenta que estaba ahí seguro. -Intentaba dormir y no me escuchabas cuando te pedí pacíficamente que bajaras el volumen de esa cosa- me hice la dolida, acto seguido Paul caminó hacia a mi para darme un suave beso en los labios, tomó el control para seguir viendo su partido. -cerra los ojos, te voy a ayudar a dormir- dijo mientras acariciaba suavemente mis piernas.
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