Baekyun es como una piedra en el trasero para Jongin, pero debe admitir que está acostumbrado a sus consejos siempre y cuando no sean del tipo amoroso, porque de eso pasa de largo. Se conocen tantos años que ya hasta perdió la cuenta, no que sean unos viejos pero ya eran mayorcitos.
Ir de un lado para otro es parte de su agitada vida. Su amigo sentado en uno de los sofás de su sala de estar le hablaba sin parar. Aquella boca suya era como un disco rayado siempre repitiendo mas de lo mismo, no se cansaba.
"Cuidado con alguna o algún modelo Jongin, ya sabes que hay muchos de ellos en una semana de la moda".
Justo sus orejas se tenían que parar para escuchar tremenda idiotez.
Sus ágiles manos cortaban en pequeños cubos una manzana para el pastel que se antojo aquella mañana, tenía dinero y podía comprarla en alguna reconocida pastelería de Seul, pero amaba cocinar.
"Que raro que lo menciones" expresó sarcásticamente mientras depositaba el producto de su trabajo en un recipiente de vidrio.
El otro continuaba con su verborrea. Jongin empezaba a tramar la manera de deshacerse de el otro hombre, quizá si le decía que Yifan estaba en la ciudad se largaría más rápido que volando. Pero el pobre Yifan no se merecia una lapa como Baek asi que mejor lo descartó mientras tanto preparaba la masa para el pastel.
"No sé para qué hablo tanto si ni atención me prestas, eres un mal agradecido, mejor me voy y que quede claro que te advertí".
Se dispuso a levantar su pequeña humanidad del sofá, se acerco hasta la barra para despedirse.
"Lo digo en serio, ten cuidado con esos jovencitos que te coquetean de manera descarada solo para conseguir algo de fama y dinero, eso daña tu buena reputación".
"De acuerdo y regresa pronto te voy a extrañar". contestó el anfitrión.
"¿De verdad?"
"No!" salió de los labios de Jongin.
" Adios Baek".
"Eres malo lo ¿sabias?" decía mientras una suave palmada era dada en la espalda del dueño de casa.
Jongin era diseñador de modas y este año decidió participar en la semana de la moda de Corea gracias a la insistencia de unos amigos. Sus diseños eran apreciados en gran manera en el extranjero por eso casi nunca estaba en Corea, con excepción de navidad o alguna fecha especial.
Pero podría ser la puerta para ingresar al mercado asiático, todo dependía de las dos presentaciones de sus diseños.
Media hora después su pastel de manzana ya casi estaba listo, sus fosas nasales se deleitaban con tan delicioso aroma proveniente del horno.
Algunos conocidos le recomendaron una agencia de modelos, por ser muy responsable y tener una muy buena reputación. Sus ojos se deleitaban con cada fotografía de la pagina de la agencia en cuestión. No tenían nada que envidiarle a los ángeles de Victoria Secret tanto hombres como mujeres poseían mucha belleza.
Eran las 10 de la mañana y se encontraba en el edificio de la agencia "Lau model" el dia anterior solicito ver a algunos modelos, a menos de un mes del desfile necesitaba asegurarse de que sus diseños serian agradables a la vista.
"Buen día Sr. Kim, soy Do kyunsoo. Le mostraré a algunos de nuestros modelos".
El joven Do de pequeña estatura lucía alegre y seguro, sus palabras eran firmes y precisas.
"Bien. Veamos que tienen".
Como primer modelo apareció un joven de piel morena y cabello rubio, bastante alto, con las proporciones justas para la alta costura. Desfilo como el profesional que era y a este le sucedieron 5 personas mas entre hombres y mujeres.
El ultimo modelo era un más blanco que los demás, llevaba el cabello cubriendo su frente y era de un castaño muy bonito.
Su mandíbula era tan afilada, la mirada tan similar a una fiera asechando a su presa hicieron contacto con los ojos del diseñador y este sintió una gran inquietud.
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El diseñador
FanfictionEl regreso a casa le hará conocer el amor en un joven varios años menor. ¿Será correspondido? Kaihun/Sekai Longfic AU