La caída de la noche.

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Deprisa, camina más rápido, no quiero que la noche caiga sobre mi en este sitio.

Sentí un cosquilleo en la espalda, este no parecía un buen lugar, mi yo de 7 años no entendía lo que pasaba, quería irme a casa, pero mama dijo que tenía que irme de allí, que su casa ya no sería mi hogar, y que yo no era digna de estar ahí, que nunca lo fuí.

Llegamos a una gran montaña totalmente negra después de caminar todo el día, sus picos eran imponentes, era bastante inquietante mirarlos, era como si estuviesen vivos y te estuviesen observando.

- te quedaras aquí ,y no te muevas hasta que me haya ido, te prohíbo que me sigas, tú ya no eres mi hija, de ahora en más, te quedaras sola, morirás aquí,  nadie nunca ha  sobrevivido estás montañas.

Se fue

Gruesas lágrimas rodaban por mis mejillas Rojas y golpeadas, me quedé allí durante toda la noche muriendo de frío y de hambre, nadie vendría por mi, de eso estaba segura.

Vague durante días hasta encontrar una cueva donde refugiarme, el hambre y el frío eran insoportables, trate de abrir  los ojos pero era imposible, ya no sentía ninguna parte de mi cuerpo, escuché voces pero lo más probable es que fuese mi imaginación nuevamente, ya ni siquiera temblaba, mamá tenía razón moriría aquí absolutamente sola.

Una Corte Oscura Donde viven las historias. Descúbrelo ahora