La Cabaña 2

Cap13- Confuso

Elena García

Mi mente da muchas vueltas, preguntándose realmente que pasó, empiezo a analizar y todo empieza desde el momento en que Carlos me dices de los supuestos "creadores" después de ahí no recuerdo nada.

Si en mi sistema encontraron drogas, alguien tuvo que entrar en la habitación, me imagino el escenario y como las cosas conectan.

—¿Elena no piensas hablar?—pregunta la teniente Lila, observándome fijamente. Estoy en la comisaría siendo interrogada y sin poder salir, creen que no estoy bien y tampoco capacitada.

Sigo pensando, y debo empezar a jugar, a creerme ser lista, que puedo ser la reina de este caso, por todas las personas que han muerto por las manos de ese asesino. No me van apoyar si sigo así.

—Tienes razón Lila, no me siento capaz de seguir con esto, no quiero más muerte. Creo que es hora que ustedes se encarguen. Espero no equivocarme.

Veo su rostro de confusión, creo que no se lo esperaba.

—No entiendo, hace unos minutos querías motivos, razones y seguir con la investigación y ahora actúas como si nada hubiera pasado, Elena eso te lo puede creer tu mamá, yo soy una agente capacita...

—No estoy tratando de convencerte, ya estoy harta de esta situación de no poder ser feliz, de que las cosas salgan mal. Sin mi, la jugada de la policía tendrá otro rumbo, ¿Cierto?

Este juego es mas retorcido, ninguna persona que se tope con este asesino saldrá de su juego mental, tuve que aceptarlo desde el momento en que me enredó en la telaraña de mentiras. Solo debo tener cuidado con las personas que me rodean. Observo que la puerta se abre con rapidez.

—Teniente hay una llamada para la señorita Elena, es importante—dice un policía interrumpiendo.

—Ve y que sea rápido.

Camino y observo que todo lo que mi papá ha construido no se puede caer. Debo mantener el legado pero primero debo hacerles creer que para mí hoy murió este caso.

—Elena, espero que te encuentres bien,  ¿estás lista para el siguiente nivel?— observaba todo mi alrededor, y me preguntaba, ¿Cómo es posible? —Elena, no sea descortés—dijo al no obtener respuesta.

—¿Qué quieres?

—Mañana, 8pm muertes—eso fue lo último que dijo.

Mi mente daba vueltas más de lo que ya estaba, pero no podía involucrarme, está vez yo sería la responsable.

—¿Oficial Elena?—pregunta una chica cuyo aspectos me parece familiar.

—¿No te acuerdas de mí? Soy yo, Yuli tu prima—viene muy de prisa con un gran abrazo y más atrás veo a Miranda haciendo señas de quién es. La observo y tampoco tengo idea—Vi todo lo que pasó y me preocupé, me prometí a cuidarte y como cambié  de residencia y estudiaré por acá, será mucho mejor vernos y platicar las charlas de familia—dice con gran entusiasmo.

—Para completar—dice Miranda con ironía.

—¿Qué quisiste decir?—dijo Yuli.

—No es personal—sonrió Miranda, noto su sarcasmo.

Observo que un hombre buen parecido, portando elegancia, se acerca.

—Oficial Elena, necesito que descanse, hay mucho por lo que debemos hablar, tienes seguridad las 24 horas, nadie se despegará de usted, tiene a quince guardias vigilando su casa y a su familia. A partir de hoy soy el encargado de su protección.

—¿Gracias te...?

—Coronel Leo Armani para tus órdenes Oficial Elena, necesito mañana hacerte unas preguntas.

—¿Mi prima descansará?—dice Yuli con gran preocupación—es que todo esto me...

—Claro cariño, tú también deberías preocuparte de descansar , no sea que el desconocido entre en tu habitación—dice Miranda con gran ironía y impotencia y veo como el coronel la queda observando y es lógico está mostrando amenazas.

—¿Y tú... eres?

—Soy la mejor amiga de Elena y gracias por ser responsable de lo que pase a partir de este momento con mi Elena, me quedó claro que Lila o teniente, ya ni me acuerdo de su cargo, no haga nada para la protección de mi amiga.

—Mira Miranda—dice Lila acercándose, me levanto enseguida para evitar un escándalo.

—Ya, lo que necesito ahora es ir a casa, estar aquí no me hace bien—digo antes que se vuelva un caos.

—Tranquila Oficial, hay un auto afuera esperando.

—Gracias.

##

Llegar a casa se sentía un alivio, esperé que todos se fueran y quedar sola, voy a mi habitación, y cierro con seguro, voy detrás del tocador haciendo girar el espejo y mostrándome un mapa completamente del pueblo y las personas que habitan. Agrego a las personas que estaban en la lista. Y en ese instante recuerdo el nombre de la profesora que fue asesinada, se llamaba Elsa y era la primera persona de la lista, arrojando que el siguiente es Luis. 

Dia actual.

Tae

Las inseguridades eran fuertes.

Nunca existió Elena.

Nunca existió esa chica en la cual estoy totalmente enamorado.

Solo queda alguien desconocido entre todo esto, una impostora.

Los dos chicos aún me observan, esperando que me levante.

—¿A quién le van a decir?—dije un poco temeroso.

Ellos no dijeron nada, solo me ayudaron a levantarme. Y me llevaron a otra habitación un poco más oscura pero observo otra puerta y la vi, era mi Elena, era ella.

Me acerco cuidadosamente, pero no está sola, alguien está en la habitación. Sigo dando pasos cortos, porque siento que me puedo desmayar en cualquier momento, las dosis pueden hacer efecto en un instante.

Observo y hay un encapuchado—Yo soy tu origen—mencionó.

Hubo un silencio que acortaba el espacio de aquella persona misteriosa y ella.

La observo que sonríe y me queda mirando—Y yo soy su creación.

Y desde ahí todo encaja en mi mente.