Ella nunca conoció el sufrimiento ni la tristeza, pero si tenia claro lo que era felicidad.
Su rostro con una sonrisa, iluminada un entusiasmo, ella quería que todos sonrieran, que vieran todo lo bueno de la vida.
Sus ojos reflejaban su interior lleno de amor y ternura.
Su comportamiento era como de una niña bien portada con modales y amable.
Aunque nunca demostraba debilidades pero siempre podrías ver como su cara estaba llena de felicidad.
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Aquel lugar donde fuí feliz
Short StoryLo que fue cambiando en la vida de una adolescente