- "Lemy por favor, solo quiero que seamos tú y yo en esta relación... no puedo soportar la idea de ver como alguien más te besa frente a mí, dudo jamas poder soportar eso. Por favor promete que solo seremos tú y yo" - esas fueron las palabras con las cuales Lemy acepto la única condición de Lacy en su relación.
Desde hace unos meses el joven se sentía peor que la basura pues no estaba de acuerdo al cien por ciento con eso, obviamente no ha hecho nada para lastimar los sentimientos de su actual pareja, nisiquiera ver a una chica linda. Ser fiel era en verdad algo sencillo hasta cierto punto, pues era fastidioso recibir coqueteo de algunas chicas y justo los Domingos era los días en que más sufría debido a cierta chica amante del metal.
- ¡Ahí esta mi futuro esposo! - grito Terry con eufórica una vez acabaron los servicios de la Iglesia, se le veía contenta cada vez que veía al joven.
- ¡Terry! - regaño Lyra a su mejor amiga pues sabía perfectamente que esa actitud incomodaba a su hermano de gran manera (y apenas lo convenció de venir los Domingos con ella a la Iglesia) - no sabes cuanto lo siento hermanito - se disculpo con gran vergüenza.
- No te preocupes Lyra, creo que ya me estoy acostumbrando a esto - el joven fue a saludar cordialmente a Terry - también me alegra verte, ¿Cómo te fue en la semana? - pregunto educadamente.
- Ya sabes, tuve un poco de miseria, odio por mi misma y una elevación de ego por crear una increíble canción... aunque me gustaría hablar más contigo pequeño, ¿Me darías tú número? - Terry mostró una actitud algo despreocupada pero estaba muy nerviosa, pues ella sabía perfectamente que su amiga la miraba con un rostro poco amigable y pese a su loco enamoramiento debía ser muy prudente con alguien que era menor - si tú quieres claro...
- Si, no hay ningún problema - el joven consideraba una grosería no dar su número, aunque luego tardaba en contestar mucho tiempo. Le dió su celular a la joven para que esta copie su número.
- Muchas gracias Lemy, por cierto, ¿Te gustaría ir a mi casa para escuchar mi nueva canción? - preguntó con cierto miedo.
- ¡Demasiado! - grito Lyra quien en todo momento escucho su conversación.
- ¡Chismosa! - contestó de vuelta la metalera - ¿Al menos los puedo acompañar a su casa? - insistió - hace meses que no voy a visitarte Lyra - su tono de voz daba entender que estaba suplicando poder ir, ahí en verdad se sentía mejor que en su propia casa.
- Esta bien - acepto de mala gana - aunque deberías ocupar tú tiempo en otras cosas, a este ritmo vivirás en mi casa - la amante de la música clásica logro ver como su amiga era más feliz en la casa Loud que en su propia casa, y no era para menos debido al comportamiento de sus padres, eran un par de adictos a sustancias ilícitas aunque ambos trabajan gastan la mayoría de su dinero en sus vicios, Lyra lo describe como gente zombie; son capaces de moverse de forma inteligente aunque con el único propósito de saciar sus más bajos instintos incapaces de cuidar a su propia hija - pensándolo mejor, Terry por favor ven cuando quieras a la casa, siempre tendrás un lugar esperándote en ella - Lyra la miró con cierta gesto compasivo.
La metalera no pudo evitar abrazar a su amiga con lágrimas en sus ojos - No sabes cuanto te quiero... en verdad muchas gracias - su abrazo se hizo más fuerte y fue correspondido de buena manera.
Lemy al ver la escena no supo como actuar, en verdad poco sabía de la amiga de Lyra, pero pudo notar de manera precisa que el problema venía desde casa; evitar sentir lástima fue inútil ya que pese a todas las malas experiencias que vive día con día junto a sus hermanas sabe de ante mano lo feliz que te hace tener una familia amorosa, aquellos quienes deben estar ahí cuando más los necesitas, el joven estaría en la misma situación si no tuviera a sus hermanas. Con gran amor fue a darle un abrazo a Terry una vez acabó con Lyra - Siempre serás bienvenida en la casa Loud... hablemos más seguido -.
Todo ese momento se definió con un abrazo sincero.
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Demasiado amor
RomanceSecuela de un poco de amor. Aceptar el legado Loud fue y será siempre la decisión de Lemy para con su familia. El joven supo desde un principio que no sería fácil llevarlo acabo, esta vez su enemigo será la vida misma. Burlas, asco, celos y aceptaci...