Heavenly - hyunlix

1

El invierno estaba por empezar y a pesar que ya se podía sentir el frío nocturno en aquella ciudad, el calor de la habitación cada vez subía aún mas gracias a las fuertes sensaciones que experimentaban ambos jóvenes al sentir sus pieles chocar mientras soltaban fuertes gemidos y suspiros, sin importarles si podrían llegar a escuchar sus vecinos.

Al llegar a ambos orgasmos y tranquilizar sus respiraciones luego de haber tenido una larga noche llena de placer, cambió sus sabanas manchadas de semen por unas limpias mientras su compañía se iba a tomar una ducha. Y, aunque a pesar de que el rubio acababa de tener el mejor sexo de su vida no se sentía completo o feliz, porque no era con la persona que amaba.

Pero Felix era una persona terca, incluso si su corazón le dijera que saliera corriendo de aquella habitación y fuera hacia los brazos de su mejor amigo no lo iba a hacer, porque en algún momento su corazón iba a dejar de quererlo, y ahí por fin su tranquilidad llegaría. Aunque pareciera que era algo que nunca ocurriría o que se sentía muy lejano, porque su corazón no quería cambiar de opinión.

- ¿En qué piensas?- la voz externa le hizo pegar un pequeño salto haciendolo salir de sus pensamientos y voltendo hacia la puerta del baño donde salía el dueño de esta con una toalla en su cintura y su cabello humedo soltando algunas gotas.
- ¿Mmh?... oh, en nada. Solo estoy algo cansado.
- Hace unas semanas que no lo haciamos, realmente te extrañé.
- Perdóname Chan, sabes que estoy en época de parciales y más el trabajo la verdad no me queda tiempo de nada, pero te prometo que esta semana te veré mas seguido - el pecoso sonrió algo triste mientras miraba al castaño que se acostaba al otro lado de su cama.
- Esta bien lix, te entiendo y no tienes por qué preocuparte, ya verás que te irá bien en todos tus exámenes. - puso sus labios en una linea curveandolos un poco mientras soltaba un suspiro- Ven, vamos a descansar un poco. - Ambos se acurrucaron en medio de las cobijas dándose calor mutuamente y quedando profundamente dormidos.

***

Felix era una persona bastante conocida, su personalidad era la de alguien muy feliz y amigable ademas de sus facciones perfectas y su hermoso y diminuto cuerpo que hacían que cualquier persona que lo viera por primera vez pudiera desearlo o estar cerca de él. Gracias a esto, a pesar de estar enamorado desde hace 3 años de su amigo, el azabache no tuvo problema alguno de cumplir con sus caprichos sexuales, ya que sabía que alguien iba a querer darle todo lo que el deseaba.

El rubio había tenido varios ligues en su vida pero nada realmente serio, siempre quiso darse la oportunidad de conocer a alguien más y enamorarse, pero esto no le era posible por los sentimientos que otra persona le generaba. Aún así no se rendía, y pensaba que en algún momento iba a llegar alguien más y le iba a hacer olvidar todos aquellos sentimientos de la noche a la mañana. Porque el menor no se podía permitir seguir enamorado de su amigo, no cuando esto podría dañar su amistad.

Y si, tenía miedo, miedo de que el mayor no le corresponda y se sienta incómodo al saber lo que sentía, que se alejara de él o que lo tratara con indiferencia. Tenia miedo de perder a su hyunjin, el que siempre lo saludaba con una gran sonrisa, el que era cariñoso con él y lo abrazaba por detrás como si fuera un niño con un peluche nuevo, el que reía cada vez que juntaban sus manos y veía la diferencia de tamaños de estas, el que siempre corría  primero a sus brazos cada vez que le pasaba algo no importaba si era bueno o malo, el que lo consolaba cada vez que se sentia triste o desesperado, el que le daba consejos y lo ayudaba, tenia miedo de perder su felicidad. Por esto Felix nunca se atrevió a confesar su amor, porque para él iba a ser primero Hyunjin que un capricho de su corazón.

  ***

Era Lunes con una mañana lluviosa, Felix se levantó a tomar su café y hacerse algo de desayuno para prepararse e ir a la universidad, habia descansado bien ese fin de semana y ahora se sentía con energía y buen ánimo, solo esperaba que ese humor le durara toda la semana. Habia quedado de almorzar con Hyunjin luego de clases, ambos estudiaban en la misma universidad solo que en distintas carreras, Hyunjin estudiaba artes visuales mientras que Felix estudiaba cine y teatro, por lo cual a ambos les quedaba fácil pasar la hora de almuerzo juntos cuando sus horarios no chocaban. El trabajo en la cafetería estuvo algo suave, aunque no llovió no hubo mucha gente gracias a la tarde fría y nublada.

Y así pasó toda su semana, esta vez no fue tan pesada ya que había terminado y aprobado todos sus parciales, y gracias a la temporada de lluvias que han ocurrido, el trabajo estuvo muy leve, por lo cual ya no se sentía tan cansado y le quedaba más tiempo en la noche para salir a cenar con Hyunjin y quedarse en una de las casas viendo alguna película mientras comían palomitas.

El pelinegro estaba recostado en el sofá viendo su celular y con su otra mano acariciaba el cabello del menor mientras este estaba recibía recibiendo gustosamente los cariños tratando de no quedarse dormido viendo la película que habían puesto.

- oye, sabes que un compañero va a hacer una fiesta por su cumpleaños y me dijo que fuera ¿quieres ir? - habló el mas alto mientras miraba a su compañía aún sin dejar de acariciar su cabello.
- ¿estará bien si voy? quizás sea algo más personal y no se sienta cómodo porque no me conoce.
- está bien, le he hablado de ti y sabe lo cercanos que somos, además dijo que entre más personas vayan mejor, asi que no creo que vaya a ser algo muy personal. - habló con una sonrisa mostrando seguridad y apoyando su cabeza en la del contrario.
- Esta bien hyuni, entonces te acompañaré, ¿cuándo es? -  habló el pecoso convencido por su amigo mientras lo abrazaba mas y se recostaba en su pecho
- Es este sabado a las 8 de la noche, no lleves tu auto, quiero que esta vez disfrutes todo lo que puedas, has tenido unos dias pesados y quiero que ahora te relajes y te dejes llevar - habló en un tono un poco bromista aunque felix sabia que lo decía de verdad y que a pesar de que no le gustaba la idea no se le podía negar, o el mayor iba a seguir insistiendo hasta que por fin aceptara. Asintió levemente con la cabeza mientras se recostaba más al mayor y soltaba un bostezo, siguieron hablando por un rato más hasta que ambos cayeron dormidos en aquel sofá.

Hyunjin se despertó a media noche y vió a Felix dormir cómodamente en su pecho, soltó una sonrisa inconsciente mientras consentía su cabello y apagaba el televisor, para luego llevarlo a su cama, arroparlo y acostarse con él a seguir durmiendo con la lluvia como sonido de fondo.