Wei Ying se encontraba en la oscuridad, hace rato que no escuchaba el rumor de las voces gritar. Esto es todo. Hice lo adecuado, pensó. Mientras se iba dejando ir un llanto sonó a lo lejos. A-Yuan... el seguro lo extrañaba ahora... seguro lo extrañaría después...
Un shock recorrió su cuerpo y todo volvió a la oscuridad. No podía morir aún. Aún faltaba mucho para asegurar la protección de su familia. Otro shock lo recorrió. Desesperado buscaba abrir los ojos. A lo lejos la voz de A-Qing comenzaba a sonar amortiguada "otra vez, aquí" un shock de nuevo "vamos despierta".
Un golpe rodeado de un brillo mirado lo hizo finalmente abrir los ojos desesperado. Todo su cuerpo dolía, su pecho estaba completamente apaleado. Pero ver a A-Qing una vez más lo hizo sonreír, mientras alzaba los brazos lentamente para intentar abrazarla, pero ella se abalanzó antes. Su olor lo tranquilizo haciendo olvidar un instante el dolor.
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Wei Ying despertó de nuevo, la luz que entraba lo cegó. Mientras sus ojos se acostumbraban vio una imagen conocida... este lugar... era su antigua habitación.
Pronto sintió un pequeño bulto sobre él. Cuando lo vio lo abrazó con fuerza, haciendo al bebé despertar, mirándolo con una hermosa sonrisa.
-¡A-Xian!- gritó Yanli mientras entraba a la habitación para abrazar su cuello - Se que es un poco tarde, pero te presento a Jin Ling- dijo desamarrando al pequeño que llevaba en la espalda -Lo siento, A-Yuan lo conoció primero- siguió mientras le sonreía.
Wei Ying sonrió, pero pronto su rostro se llenó con nostalgia -... Aún me falta una sonrisa por ver-
-¿Huh?- dijo Jiang Cheng entrando
-Tu nunca sonríes, así que no te sientas aludido- dijo Wei Ying riendo.
-¡Tu...! todavía que traje de vuelta a la vida-
-Vamos, seguro hasta disfrutaste apalearme- dijo carcajeándose, haciéndolo dolerse un poco.
-¡Ahora si te daré una paliza que disfrutaré!-
-Gracias Jiang Cheng. Por todo- dijo Wuxian sonriendo con una pequeña lágrima. Tomando por sorpresa al otro.
-Estoy haciendo lo posible por traerla aquí- dijo tras un rato el de morado -la otra opción es que te vayas a vivir a Gusu, pero dudo que los Lan te soporten mucho tiempo-
-¡Vamos! Lan Zhan te ayudó en esto, seguro no me desprecia-
-...tanto- dijo Jiang Cheng con una ligera sonrisa.
Los tres hablaron por horas. Wuxian había estado rodeado de gente que lo apreciaba, pero no había más reconfortante que regresar a tu hogar.
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Los días pasaron más y más mentiras de los Jin fueron cayendo, finalmente la secta no quiso que su nombre se viera manchado y decidieron que Jin Zixuan tomara el mando en lo que se decidía el destino final de su padre y medio hermano. En ese momento Yanli regresó a la torre Koi a mostrar apoyo a su esposo en ese duro pero necesario momento.
La culpa fue quitada de Wei Ying, y pronto se le permitió salir del muelle de loto, pero Jiang Cheng no estaba muy conforme, solo permitiéndole ir a Gusu libremente.
Todos acordaron que los Wen se quedaran en vigilancia de los Lan, caracterizados por ser respetuosos de las normas, y no crueles.
Cuando Wei Wuxian llegó al lugar donde se encontraban fue interceptado por Wangji, quien le dijo que no podía ingresar
-Vamos, vengo a ver mi esposa- dijo el de negro con una sonrisa
-No mientas-
-Aquí traigo la prueba de mi matrimonio- dijo enseñándole al Lan el pequeño que llevaba en su espalda, viendo su rostro no estaba seguro, de hecho se parecía más a esa alfa..., cuando el pequeño sonrió supo que no había robado a ese pequeño de cualquier lado.