Capítulo 17.

564 63 0
                                    

Narrador omnisciente.

Tras haber ayudado a Luffy y revisar que todos estaban en buenas condiciones, el Sunny zarpó de la plaza con todos los nakamas en él, huyendo del lugar antes de llamar más la atención.

"¿Es realmente necesario que se tengan que ir como si estuvieran huyendo?" cuestionó la princesa, a lo que los demás respondieron obvios.

"¡Claro, si nos quedamos tras haber peleado en la plaza como si fuera un espectáculo, nos van a considerar héroes!" explicó Umiko.

"¿No es eso bueno?"

"Por supuesto que no, un héroe compartiría todo el licor. ¡Yo lo quiero beber todo!" espetó Zoro, a lo que la pelirroja asintió de acuerdo.

"¡Vamos, Jinbe! ¡Vayamos de aventuras juntos!" pidió el capitán de los mugiwara.

"¡Sí, jefe, únete!" apoyó Usopp.

"Sería genial tener a un ex shichibukai en la tripulación."

"Me siento honrado y agradecido por la propuesta, pero ahora mismo no puedo. Sé que sería divertido navegar juntos, sin embargo aún tengo cosas que hacer. Digamos que estoy en una posición que deje temporalmente y ahora tengo que hacerme cargo. Cuando haya aligerado las cargas de aquella responsabilidad, prometo que iré en busca de ustedes, y si para ese momento piensan lo mismo, ¿me volverían a invitar, sombreros de paja?"

"¡Lo prometiste, ¿de acuerdo?!" gritó Luffy algo molesto por tener que esperar.

"Te estaremos esperando, Jinbe."

"¿Y ahora qué haremos?" preguntó el espadachín confundido. "¿Simplemente iremos directo al Nuevo Mundo?"

"Supongo, ¿qué más nos falta por hacer aquí?" contestó Kokai.

"¿Ya se van de la isla? No les he agradecido formalmente y quiero seguir escuchando sus historias." dijo Shirahoshi al borde de las lagrimas.

A lo lejos se acercaba uno de los soldados del ejercito real, al llegar a un lado de los piratas indicó a la persona al otro lado del den den mushi que ya estaba con los mugiwara, hablando el Neptune.

"Luffy-kun, ¿por qué han huído?"

Umiko decidió alejarse, pues estaba cansada y quería dormir un rato en lo que se iban, sin embargo, su oreja parecía no poder evitar escuchar cosas interesantes, como el hecho de un banquete.

"¿Banquete?" cuestionó la chica volviendo a donde sus nakamas. "¿Con comida y licor?"

"Parece que tendrás que compartir tu alcohol después de todo, Zoro." rió Nami burlona, haciendo referencia a lo que dijo el espadachín con anterioridad respecto a que los piratas no comparten sus bebidas.

Umiko sonrió al espadachín, quien tronó la lengua y desvió la mirada con una ligera sonrisa. "Ya qué."

De rato ya se encontraban festejando en el palacio encantados bajo la música, las risas y las voces de todos. Cada nakama estaba en los suyo, desde degustando bebidas a saciando el hambre y sed de alcohol que tenían, o estaba aquel disfrutando de la vista de las sirenas.

Por su lado Roronoa y Kokai se veían con una mirada sería mientras sujetaban sus tragos, levantaron lentamente los vasos y bebieron rápidamente uno tras otro, en lo que parecía ser una competencia declarada sin palabras.

Las últimas botellas de sake tocaron el suelo con fuerza y algunas gotas salpicaron a su alrededor, ambos limpiaron sus bocas con sus respectivos brazos y suspiraron.

"¡Gané!" gritaron ambos al unísono.

Se recostaron en silencio luego de declarar sus victorias, o mejor dicho empate, y se quedaron dormidos.

TERROR || Roronoa ZoroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora