Capítulo trece: Disco de Vinilo

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-Si tan solo...fuera más linda.

Jennifer se sentó en su sofá, repitiendo cosas porque no entendía que acababa de ver.

-¿Porque mi corazón duele tanto?

Solamente llegó a llorar. Ella solo quería escucharlo y estar a su lado. A veces, sentia que era mucho pedir. Se aclaraba que en realidad, nunca llegaron a algo serio después de aquella noche.

A lo lejos, veía la caja que con tanto cariño había hecho para el. Aquel disco de vinilo que venía dentro que le costó tanto conseguir por ser edición limitada de la banda que el amaba. Las galletas que quedaron en el suelo.

En eso, se escuchó el sonido de una notificación interrumpiendo las lágrimas de la chica.

E.- Hola, bonita! Al final, nos podremos ver hoy? No quiero que el día termine sin vernos.

Sintió como un escalofrío recorrió todo su cuerpo. Dudó en responder, tomó fuerzas y lo hizo.

J.- Claro, sí. Puedes venir a mi departamento?

E.- Llegaré en unos minutos, si? Nos vemos

No quiso responder eso último, se levantó de su cama, limpio sus lágrimas. Simplemente quiso actuar como si no hubiera visto algo, se daba vergüenza al hacer lo que estaba haciendo pero, no tenía corazón para decir algo si nisiquiera eran pareja, nada. Solamente, se querían mutuamente o eso creía ella.

...

-Wow, dios mío. ¿Donde conseguiste el disco?

-En una tienda...

Erick nisiquiera notó el tono de voz, solo la abrazo mientras le agradecía por comprarle el disco que el no pudo comprar.

-Muchas gracias, de verdad te quiero demasiado, eres lo mejor que conocí.

-No es nada.

Ella se tragó sus lágrimas mientras le mostraba una sonrisa cálida, luego de eso, Erick se despidió porque dijo que se iría a su casa a arreglar algunas cosas.

La puerta se cerró y Jennifer se quebró.

-Lo mejor, eh...

Se acostó en su cama y miro al techo, entre susurros dijo:

"Quédate aquí, no te vayas".

Como me siento.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora