R: Ay amor ver -el se acerco para abrazarla- necesitamos ir a un doctor ya
V: No Rafa, yo ya sé que tengo -ella se sentó en la cama y el se quedó frente a ella observándola-
R: ¿Y según tú qué es lo que tienes?
V: Seguramente es un virus que agarre por ahí o una infección, nada del otro mundo, no tenemos por qué ir al doctor
R: Ay Vale, que necia eres -suspirando- si mañana amaneces igual así te lleve a rastras vamos a ir al doctor
V: Está bien
R: ¿Cómo te encuentras ahora?
V: Bien, no es una muy buena manera de iniciar el día pero estoy bien -sonriendole-
Ellos estuvieron un rato más abrazados y después dispusieron a arreglarse, Rafael tomó unos jeans tipo tubo y una camisa en color negro y se puso unos zapatos a juego, Valentina de igual manera se puso unos jeans pegados a sus piernas y eligió una blusa en color lila, eligió sus tenis favoritos y se alació el cabello, de maquillaje solo hizo lo básico y así los dos ya estaban listos, Rafael quería llevarla a desayunar a un lugar especial, ya tenía todo planeado pues le haría creer que el desayuno era su sorpresa, él había acabado de afinar detalles cuando Valentina salió del baño ya lista, el no pudo dejar de verla embobado
R: Nunca me voy a cansar de decírtelo, eres perfecta Valentina -el llevo las manos a su cintura para después besarla-
V: Ay ya Rafa que me la voy a creer -dijo mientras sus mejillas cambiaban a rojo enterneciendo a Rafael-
R: Creetela mi amor, tu eres la mujer más bella que han visto mis ojos, me tienes encantado con cada parte de tu ser, estoy más que enamorado de ti y eso durará en esta vida y en mil más -le dio otro beso en los labios-
El solo sintió como ella lo abrazó y empezó a llorar en su pecho, en ese momento se asustó pues pensó que había dicho algo que la hizo sentir mal
R: ¿Que dije Vale? Perdoname por favor yo..
Valentina no dijo nada y solo lo beso dejándolo aún más confundido, desde el inicio el beso ya era subido de tono aunque el lo acepto con gusto pues podían pasar una vida entera besándose, luego de unos minutos se separaron
V: No dijiste nada malo -llevo sus manos al rostro de el para acariciarlo- simplemente me hiciste sentir especial con lo que me dijiste, algo muy muy bueno tuve que haber hecho para que la vida me pusiera a alguien como tú en mi camino y más aún para que seas mi compañero de vida -dijo con la voz cortada- Te amo Rafael, más de lo que te imaginas e incluso más de lo que yo misma dimensiono
Rafael la beso nuevamente, ellos no eran muy románticos al menos el no los cataloga así pero cuando llegaban a serlo se lo decían con el corazón, no había ninguna duda, ellos eran el uno para el otro.
Después de ese momento ellos salieron hacia el lugar que Rafael había acordado para empezar ese día que seguramente quedaría en la memoria de los dos
V: ¿Ni siquiera me puedes dar una pista pequeña de a dónde vamos? -pregunto con una cara traviesa, como si de una niña pequeña se tratase-
R: No, es sorpresa mi amor, ya te lo dije -sonriendole- lo que si te puedo decir es que falta muy poco para llegar así que necesito que te pongas esto -dándole una pañoleta-
V: Ay Rafa pero es que..
R: Es que nada señorita, póngasela sin renegar -dijo firme aunque estaba tratando de reprimir una sonrisa al ver a su Vale renegando como niña -
Ella a regañadientes se puso aquella vendoleta, tal y como el lo había dicho unos minutos después ya habían llegado, el la ayudó a bajarse para después empezar a caminar, luego de un pequeño tramo de caminar se pararon
ESTÁS LEYENDO
Las dos caras de una sola mujer
Fiksi PenggemarValentina, una mujer de 28 años con una vida aparentemente perfecta, comprometida con un empresario, reconocida por los demás por su gran belleza y ternura acompañada de su enorme amabilidad, la vida le jugó en contra desde su niñez dejando heridas...