Querida, querida.

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AU: Gabriel virgen.ADRIEN ES HIJO ADOPTIVO de Gabe HAKFUAKDA. ( no pregunten el por qué o Lea pego )

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No importa lo que hagan; nunca saciarán ese libido de ella.

"Oh querida.. Dulce y estrecha. Dulce cómo tus besos, dulce cómo tu piel."

Ella no tendrá nunca que follarse a sí misma con la mano o con un juguete. Nunca más.

¿Cómo pasó todo esto? Fácil.

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Nathalie al ver siempre a su jefe puede llegar a tener un subidón de querer ser cogida, de querer que esas manos de su jefe rondeen por todo su cuerpo, que esos dedos estén metidos en su cavidad, que todo su ser sea de él. Pero sabe que todo eso no lo puede tener. Él en el contrario es alguien que jamás ha tenido relaciones por lo que dicen las redes y también por lo que él le dijo luego de tomarle confianza.

Conclusión? Que Gabriel Agreste es alguien virgen.

Y ella? Alguien que no puede saciar su libido por más que quiera.

Hoy en día quiere romper ese récord que se ha llevado durante todas estas semanas. Un récord que no sabe si está orgullosa o simplemente está decepcionada de ella misma con el mero hecho de que con solamente ver al hombre que ama, un subidón de calentura se le suba y quedé entre sus piernas.

Por hoy se ha proporcionado que no se tocaría. No se calentará.

Difícil pero nunca imposible.

Se puso una falda negra que le llegaba arriba por un par de centímetros de las rodillas, una camisa blanca de botones y manga larga para no desviarse del protocolo. Unas zapatillas de tacón bajo, su cabello suelto y sus lentes. Con eso le basta.

Salió de su habitación para ir hacía el atelier para poder concentrarse en su trabajo y no en un rubio alto, británico y jodidamente sexy cuando está en solamente su camisa mangalarga.

Al entrar al atelier lo primero que hizo con su mirada fue posarla en su escritorio para evitar todo lo que tenga que ver con su jefe ya sea evitarlo en hablar y ver. Tiene que al menos romper el récord que lleva. Y hoy es el día.

Tragó en seco al sentarse en su silla y ver por el rabillo de su ojo a su jefe, sabe que por las mañanas siempre están solos. Adrien en el colegio y John siempre cuidándolo cuando ella no puede estar ahí. Su mirada se puso en su escritorio, prendiendo este y tomando en sus manos la tablet que siempre yace al lado de la computadora. Es fácil pretender que no estás caliente enfrente de tu jefe y que este sea tan despistado cómo para siquiera notarlo, es simplemente mágico si se atreve a decirlo.

Levantó la mirada hacía su jefe al haber escuchado un leve gruñido de parte de él.

Y ahí mismo Nathalie sabe que ha perdido la noción de poder romper ese maldito récord. No puede, simplemente hoy no es el día y jamás lo será para romperlo.

Nathalie tomó cómo se veía su jefe esa mañana; pelo desordenado, pantalones negros arrugados y su camisa blanca de siempre arrugada también, sus lentes no estaban presentes por lo que llevaba lentillas de contacto. Simplemente una maravilla de ver, una sensación que Nathalie siempre aprecia cuando tiene la oportunidad de verlo de esta manera. La cual no es tan frecuente.

Nathalie desvío la mirada al sentir ese subidón de la nada y quedarse entre sus piernas, las apretó fuertemente y dejó escapar un suspiro de placer al sentir esa mini fricción. Necesita salir de ahí y simplemente tocarse hasta el punto de tener las piernas cómo gelatina.

Solo por diversión. [Gabriel x Nathalie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora