OUTRO

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— ¿Cómo está, Señor Min? — dijo un sonriente Yoongi.

— Muy bien... Hermoso anillo el que lleva, por cierto — contesta Jimin al seguirle el juego.

Jimin y Yoongi sonreían como dos niños que han logrado conseguir dinero para golosinas y sus manos estaban unidas con la fuerza de un par de imanes gigantes. La alegría de saberse casados emanaba de cada uno de sus poros, como si la felicidad fuera tanta para desbordar sus cuerpecitos.

Felicidad que las expresiones que recibieron de su mayor y su líder no esfumaron. La cosa es que ese mismo día tenían un concierto y entre anillos y votos matrimoniales lo habían olvidado — o como Jimin decía: lo habían recordado tarde.

Así que naturalmente sus compañeros de grupo — al menos los que no eran Taehyung — los recibieron o con una contundentes cara de enojo o curiosidad.

— ¿Se puede saber dónde estaban? Creo que fui muy claro cuando llegamos y... — sus palabras fueron detenidas por Seokjin, quien miraba a la pareja con una ceja enarcada.

— Namjoon, míralos bien.

Min y su esposo sonríen aún más, y alzan sus manos, esperando que el líder capte lo sucedido.

— Si, veo que en una hora veremos a ARMY y ellos aún no están listos.

Jungkook se acerca a sus hyungs y los abraza muy fuerte, confundiendo a Namjoon. El mayor del Bangtan rueda los ojos y acerca sus labios a su oído.

— ¿Qué no has visto sus anillos? — el líder murmura un casi inaudible "¿huh?", que le indica a Seokjin que debe seguir hablando — Están casados, creo que sus chistes del drive thru no eran tan chistes...

Negando con su cabeza, el Kim mayor deja salir una sonrisa que no podía disimular más y se acerca a felicitar al nuevo matrimonio. Podían pasar muchas cosas, pero su felicidad siempre estaría primero para él.

Porque son sus hermanos, lo más valioso que tiene.

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Había pasado un buen rato desde el inicio del concierto y realmente estaban más cerca del adiós que de una bienvenida, pero aunque no haya terminado pueden decir con seguridad que fue uno de sus mejores shows.

El público estaba muy animado y cantaba sin parar todas sus canciones, lo cuál combinaba con la energía y alegría que todo Bangtan estaban sintiendo luego de la noticia del matrimonio de sus amigos.

Así que era más que un éxito porque todos disfrutaron, ni el cansancio hizo efecto esa noche. Al contrario, incluso los novios luego de tal atareado y largo día no podían borrar su sonrisa y no paraban de juguetear en el escenario. Abrazos por los hombros por aquí, miradas por allá, sonrisas mutuas y versos dedicados al otro.

Pero la mejor parte del concierto — para Min y Park — era la llegada de 'So What'. Ah... Esa canción los mantenía a todos saltando por todo el lugar junto a ARMY, pero para ellos en particular era algo más divertida. Desde que la presentan en conciertos, ambos dedicaron los últimos versos de Jimin para juguetear de diferentes formas: imitarse el uno al otro o quizá gritar sus nombres en la gran pantalla.

¿Qué mejor que coronar ese día con otro momento así?

Por lo que no dudaron un segundo: cuando dicha canción y dicho verso llegó, Yoongi se acercó a Jimin — quién estaba en medio del escenario — y apoyó algo en su hombro. Cuando el menor notó algo, volteó su rostro encontrando el de su amado en primera plana.

Yoongi había apoyado su mentón en el hombro — no desde atrás sino de costado — de Jimin, así que cuando este volteó sus labios quedaron a centímetros de chocarse.

Quizá se habían dejado llevar demasiado, pero los gritos imparables de ARMY los animaban a no apartarse tan rápido. Yoongi guiña un ojo a sus fans y deposita un pequeño beso en la comisura de los labios de Park.

Ah, la vida de casados empezaba de la mejor forma.

Las Vegas, baby... [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora