𝑩𝑬𝑻𝑾𝑬𝑬𝑵 𝑼𝑺 ─hyunin

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Chapter 26: the deal.

—De verdad lo siento y no sé cómo decírselo —JiSung lloraba en los brazos de Bang Chan, mientras ChangBin acariciaba su espalda e intercambiaba miradas preocupadas con él.

Han los había llamado a ambos, su antiguo grupo de universidad, para finalmente dejar salir todo lo que tenía dentro.

Pues ese almuerzo catastrófico que había tenido, fue su punto límite.

Ya no quería seguir siendo —o intentar serlo— el hijo perfecto. Quería volver a producir música, pintarse las uñas y besar a MinHo todas las veces que quisiera.

—Pues, ¿Qué quieres que te diga? Sung, te has equivocado mucho.

—¡Ya lo sé! Pero escuchen... He dejado la carrera. Adiós ciencias económicas, desde hace ya un mes.

—¿En serio? —preguntó ChangBin, sorprendido.

Asintió. —Estoy cansado, a partir de hoy haré lo que se me ocurra-

—¿Por qué este cambio tan repentino? —el australiano interrumpió. —¿Por qué tocar fondo para hacer esto?

JiSung bajó sus hombros, reflexionando sobre aquellas cuestiones.

—No lo sé. Sólo quería hacer las cosas bien, que alguien estuviera orgulloso de mí; pero luego ví el mundo de mi hermano demoronarse en sus ojos —suspiró. —Y no ha parado de llorar en las noches; no es que le escuche, pues no emite sonido, sino que sus ojos están irritados y su voz completamente rota.

Ambos mayores volvieron a verse entre sí.

—¿JeongIn? ¿Ahora qué le has hecho?

—Escuchó una conversación fuera de contexto y... Metió a HyunJin en algo que no tuvo qué, están peleados ahora.

—Joder —ChangBin tomó su teléfono. —Hwang es demasiado sensible, voy a marcarle.

El mismo abandonó la habitación. Chan caminó hasta JiSung.

—¿Charla fuera de contexto? —inquirió.

Sí, estaba algo molesto con JiSung. Y le dolía un poco la razón.

No tenía nada que ver con su amistad, pues era de sus mejores amigos, sino que... Aún sentía cosas por su hermano, y saber que JeongIn estaba pasando por un momento terrible, le carcomía por dentro.

—Sí —asintió. —Intentaba convencer a papá que estaba a su lado, para no generar sospechas, y cuando menos se lo esperaba, lanzar todo. Pero In lo escuchó, y... Sabes lo impulsivo que es.

Cruzó sus brazos. —Mejor tarde que nunca, Sung. Tienes que ayudarlo ahora, como él tanto quiso ayudarte a ti.

—Eso es exactamente lo que voy a hacer.

•

YeJi salió del salón, sintiendo como dejaba ir de a poco toda la tensión del exámen de matemática.

Había sido un horror.

Pero creía tenerlo, estudiaron más de lo suficiente y a pesar de los nervios, quería creer que todo fue bien.