Pueblo Zombie

Parte 1. La pesadilla

Oscuro y confuso.
Todo comenzó aquí.
Borroso.
Se escucha el sonido del motor a toda velocidad. A pesar del estruendo, lo único que él escucha es el sonido de su respiración agitada y las miles de voces en su cabeza.
No hay nada a kilómetros. Lo único que ve es un camino frente a él.
Silencio a su alrededor.
Le cuesta trabajo respirar y ahora lo hace cada vez más fuerte.
El dolor de espalda es insoportable.
Pisa el acelerador cada vez más fuerte.
Rápido.
Rápido.
Rápido.
Como sus manos están llenas de sangre, cada vez que se limpia las lagrimas del rostro, se ensucia más la cara.
Algo dentro de él le dice que no vivirán.
Cada bocanada de aire que toma hace que su pecho duela más.
Entonces, en un descuido, pierde el control.
El giro de volante tan brusco provocó que el auto girar a toda velocidad causando que se saliera del carril y rodará violentamente sobre sí.
Todo en un instante.
Los vidrios explotan en miles de diminutos pedazos. La carrocería se golpea y achicharra como un fajo de billetes. Las puertas no soportaron el impacto y se desprendieron y salieron volando como un par de cuchillas avispas. Cada centímetro de su cuerpo es golpeado y sarandeado con la fuerza del golpe desde el interior del auto. Y de pronto se a quedado sordo.
Todo en un instante.
Cuando el auto porfin paro su violenta sacudida, quedo boca abajo y medio aplastado sobre si mismo.
Ni un grito. Solo gemidos de dolor.
Ni aún alma al rededor.
Solo él.
Su mano destroza, ensangrentada y temblorosa se asoma por lo que hace un momento era el parabrisas. Se estira lo más que puede y con todas sus fuerzas como sí estuviera desesperado por alcanzar algo.
Quiere salir.
No puede sentir la mitad de su cuerpo.
A descubierto su otra mano. Su muñeca se a contracturado casi al revés y a perdido el dedo indice y el dedo anular. Su mano ahora parece una cascada de sangre que brota hasta la punta de su codo en dónde se precipita hacía el suelo.
Dolor.
Se apoya sobre sus codos y fuerza su peso hacía afuera desesperado por salir de ese ataúd de metal.
La mitad de su cara esta empapada en sudor y sangre. Su cabeza casi a sido partida a la mitad por una herida que va desde su nuca hasta su frente.
Empieza a escupir gárgaras de sangre para no ahogarse con ellas.
Lucha, lucha por salir del auto.
Ahora comienza a gritar.
Lucha por salir.
Se arrastra un poco sobre el suelo. Solo un par de centímetros, lo suficiente para sacar la mitad de su cuerpo del auto.
Ahora puede usar sus rodillas para arrastrarse más.
Lucha.
De poco a poco y con todas sus fuerzas sale del auto.
De pronto se detiene. Sus gritos han parado. Lentamente gira su cabeza para inspeccionar su cuerpo y se da cuenta que también a perdido una pierna. Su pierna derecha se ha desprendido a la altura de la rodilla, seguro quedo prensada entre el asiento del conductor y el tablero.
Mirar su rodilla destrozada y sin su pierna lo hizo dar el grito más fuerte y desgarrador de su vida.
Antes de rendirse y tender su cabeza contra el suelo, escucha una voz llamándolo.
-Jonathan! Jonathan!.-
Es todo, no puede más.
Lentamente cierra los ojos y se rinde.
-Jonathan!.-
-Ahhhhhhhh!!!.- Gritó Jonathan.
-Qué te pasa!? Estabas sacudiendote y balbuseando cosas.-
En ese momento Jonathan se da cuenta que su madre lo ha despertado.
-Estas bien?.- le pregunta su madre.
Jonathan se reincorpora lentamente y se da cuenta en donde esta.
Se a quedado dormido en el asiento trasero de el auto en una posición muy incomoda. Su hermano David que se encuentra aún lado de él le dice: -Y ahora que tienes? Estabas dormido y de repente empezaste a sacudirte y a decir cosas.-
Espabila.
Jonathan estira su cuerpo y después de un gran bostezo se talla los ojos.
Se da cuenta que ha estado sudando.
Camino.
La família de Jonathan a emprendido un lago viaje por carretera. Al bolante se encuentra su padre; el señor Javier, en el asiento del copiloto va su madre; la señora Lucy y atras, en los asientos de pasajeros, se encuentran Jonathan y su hermano mayor David.
Sin dejar de mirar al frente en el camino, el señor Javier pregunta a su hijo: -Qué te paso Jonathan? Tuviste una pesadilla?.-
Jonathan siente un terrible dolor en la espalda y el cuello y pregunta: -Cuánto tiempo dormí?.-
David responde: -Como una hora.-
-Tuve una pesadilla horrible. Soñé que iba conduciendo un auto a toda velocidad y de repente... .-
Jonathan se queda callado un memento.
-Na, mejor olvidenlo.- dice entre dientes.
La señora Lucy gira la cabeza para dirigirse a a él y dice: -Ya no vuelvas a dormirte que ya casi llegamos.-
Entonces Jonathan se queda mirando a lo lejos. Cientos de kilometros a su alrededor y lo unico que ve es campo abierto, bosques frondosos y colinas empinadas. Una zona rural es a donde se dirige la família.
Entonces, una vez que Jonathan se a reincorporado a la realidad, recuerda el motivo del viaje de su família.
-Llegaremos a tiempo para el funeral de la tía Bety?.-