Prologo

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La nevada era aún más fuerte en ese lugar, mientras que Tanjiro veía con su amiga de infancia aquella familia que se había reunido como un día especial, el día del cumpleaños de Hanae aquella chica de apenas 13 que estaba a lado de su amigo de su misma edad ambos veian en Shock la escena enfrente de ellos, esa escena tan horrible y espantosa para ambos, los llantos de la bebé de 1 años apenas aparecieron, ya que Hanae cargaba a su hermanita de un años en su pecho cubriéndolo del frío y por su petición logro llevarla con ella y Tanjiro a vender carbón.

(......)

Tanjiro respiraba agitadamente, mientras que Hanae igual pero cubria más a su hermana que ella misma. Ambos chicos trataban de superar sus dolores de pies, sus dolores de pulmón por el congelado aire que entraba de sus fosas nasales hasta llegar a sus pulmones.

Las lagrimas no eran de esperarse en los ojos rojos y grises de ambos quienes lloraban aún por sus familias.

Tanjiro- ¿Por que?, ¿por que tuvo que pasar esto?, Nezuko, no te mueras, ¡no te mueras!. -Pensó el cargando a su hermana en su espalda miro de reojo preocupado y afligido a sí amiga quien cargaba y abrazaba calentando lo más que podía al bebé.- ¡Te prometo que te salvaré, Nezuko, Hanae solo aguanten un poco!. -Le dijo tanto a su amiga que a su hermana.- No dejare que mueras, tu hermano te salvara. -Esta vez hablo para su hermana.

Hanae suspiro con sus labios temblando mientras que cerraba sus ojos agachando su cabeza para luego abrirlos entrecerrandolos mirando a su hermana quien dormia tranquilamente con algo de frío pero no era mucho que cargaba por las mantas, la de ella, la que lo ayudaba a mantenerse apegado a su hermana y el abrigo pequeño que traía.

Hanae- No te preocupes, pequeña... que tu hermana mayor te protegerá. -Dijo ella sonriendo observando a su hermanita.

El vínculo que nos une | Tanjiro Kamado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora