Ayato Spitroass Thoma SOLO!

Parte 1 unica

Resumen:

Ayato usa su clon de agua para ayudarlo a escupir a Thoma. En la mesa de té. Eso es todo. Esa es la ficción.

Notas:

Escribí esto hasta las 3:30 am, así que disculpe mi gramática.
También es mi primer fic obsceno.

Editar: ahora es el día siguiente, y no recuerdo haber escrito esto.

(Ver el final del trabajo para ).

Texto de trabajo:

Kamisato Ayato estaba teniendo un buen día hasta que salió de la sede de Yashiro. En primer lugar, estaba lloviendo. En segundo lugar, notó que los dos guardias apostados afuera de la puerta no estaban en sus posiciones. En tercer lugar, dichos guardias estaban en medio del patio de Kamisato rodeando a su ama de llaves.

Intercalado entre dos soldados con armadura en el pabellón de té, Thoma hablaba en voz baja. Aunque tenía una sonrisa plasmada en su rostro y un gesto tranquilizador con la mano, Ayato lo conocía lo suficiente como para saber que no estaba manejando bien la situación. Ayato cerró las puertas del cuartel general detrás de él y caminó hacia ellos.

"¿Puedo saber qué está pasando?" preguntó Ayato, sorprendiendo a los tres.

"¡Co-comisionado Ayato!" un guardia jadeó, inmediatamente retrocediendo de Thoma, devolviéndole su espacio personal. "Nada esta pasando. Estábamos hablando con Thoma, eso es todo.

Ayato los fulminó con la mirada. "¿Y abandonaron sus puestos? ¿Qué pasaría si alguien se hubiera escapado de ti y hubiera entrado en la sede? Eso nos pondría a mí y a mi hermana en peligro", dijo con severidad.

Los dos guardias inmediatamente enderezaron sus espaldas y agarraron con más fuerza sus armas de asta. "¡Comisionado, lo sentimos señor!" gritaron al unísono.

Las palabras para regañarlos aún más estaban en la punta de su lengua, pero una mirada a Thoma, y ​​Ayato tenía otros planes.

"Ya que ustedes dos piensan que proteger la Comisión Yashiro no es suficiente para ustedes dos, hay algo más que pueden hacer". Ayato apenas podía concentrarse en sus dos subordinados. No cuando Thoma se veía tan delicioso, con su labio rosa fruncido y la frente fruncida en un lindo ceño fruncido. "Fuera de la propiedad, ha habido informes de que los hillichurls están escoltando un globo de limo, posiblemente cargado con carga peligrosa. Normalmente le asigno este tipo de comisiones a la Viajera, pero actualmente está ocupada. Destruye el globo de baba, luego regresa e infórmame", instruyó Ayato.

Los dos guardias se estremecieron ante su castigo. En lugar de quejarse, levantaron sus armas de asta y arrastraron los pies fuera del patio.

Los ojos de Ayato siguieron a los guardias mientras se iban. "Thoma thoma", suspiró. "Mira la lluvia, nadie más que nosotros estamos afuera en este momento", observó. Dio un paso adelante, justo en frente de Thoma, frotándose los brazos. "Y parece que estás usando demasiada ropa para mi gusto en este momento".

Thoma retrocedió, pero Ayato lo siguió, deteniéndose cuando sus pantorrillas golpearon el borde de la mesa de té en medio del pabellón. "Comisionado Ayato, todavía estamos afuera. Y hace demasiado frío para quitar algo en este momento —murmuró. La confianza y la valentía que mostró antes cuando se enfrentó a los dos guardias mucho más grandes se habían ido. Ahora se sentía tímido y muy consciente de su posición comprometedora. Un rubor rojo se deslizó por su cuello, desde la clavícula hasta las mejillas. Thoma podía sentir que le ardían los oídos. Ayato sonrió y apartó un mechón de cabello rubio que cubría sus orejas rojas.
"Y tú eres un usuario de pirotecnia. Tener frío no es un problema aquí", dijo Ayato con calma. Su mano ahora ahuecaba la cara de Thoma, sonriendo mientras los ojos de su ama de llaves se acercaban y se apoyaban en su mano. "Además, es Ayato cuando estamos solos", agregó.