El último día de nuestras vidas, puede llegar en cualquier momento. Sin saber uno, cuando será o como será, llega sin previo aviso a nosotros. Cuando llegó mi último día, se sintió muy raro todo. Aunque recuerdo cómo si todo hubiera Sido ayer. Porque realmente fue ayer. Con solo despertar ya sabía que este sería un día diferente, pero no sabía que sería tan diferente a los demás, me levanté fui al baño a lavarme la cara, salí a l cocina para desayunar antes de irme a trabajar. Cómo todos los días lo hago, la misma rutina de siempre sin cambiar ni un solo día durante 4 años. Hasta el día de ayer…
Al salir a la calle, rumbo al trabajo no podía dejar atrás una sensación diferente a la de todos los días. No entendía porque me sentía así pero era Interesante. Todos los días mientras iba al trabajo me encontraba a mucha gente, entre ellos estaban Pablo el dueño de la frutería cerca de mi casa. Pablo siempre a Sido muy amable conmigo, aunque parezca un señor de cincuenta y tantos de años cascarrabias que le pone una mala cara a todo el mundo, pero realmente el no es así, es un hombre amable de buen corazón, que inclusive me a regalado frutas cuando me ha visto yendo apresurado al trabajo y no me dio tiempo para desayunar. Es un buen hombre lastima que siempre los buenos siempre terminan mal..
Otra persona que me encontraba siempre justo antes de llegar era la señora fung, ella era una mujer china que aparentaba unos 30 años pero que realmente, era mucho más mayor solo que usaba esos trucos de su país para aparentar ser más joven. Ella manejaba un negocio de comida china muy conocido en la zona. Todo el que viviera por aquí había ido a comer alguna vez a su local, además ella era una mujer muy interesante y sabía. Siempre me ayudó escuchando todos mis problemas y las situaciones en las que me encontraba y siempre tenía un consejo guardado para mí. Inclusive hoy cuando me vio, me dio un consejo rápido. Si no mal recuerdo, ella me dijo: nikolai te aconsejo que llames a tu mamá hoy a ver cómo está, y la saludas de mi parte.
Nikolai- claro señora fung, gracias por el consejo nos vemos más tarde.
Al llegar salir del trabajo la llamaré (que mala decisión tome)
Seguí mi rumbo al trabajo, me faltaba muy poco para llegar. Incluso veía la cima del edificio de la empresa en la que trabajaba solo me faltaban dos cuadras para llegar. Incluso vi a un compañero en vía al trabajo en su carro. No le pedí que me diera un aventón porque no hablamos casi nunca en el trabajo así que no lo creí apropiado, pedirme algo así. Igual ya casi llegaba no faltaba mucho e iba a seguir con mi día normal y corriente creía.
Al instante, cada vez que me acercaba más, comenzaba a escuchar más fuerte unos fuertes zumbidos que provenían cerca del trabajo no les hice mucho caso, pensé que era lo más seguro sonidos de alguna construcción cercana. Pero al cruzar la última esquina me di cuenta que fue un grave error.
De repente vi a mucha gente corriendo despavorida hacia mi dirección, no entendía porque, no sabía que era lo que pasaba. Hasta que mire hacia arriba. Vi varios helicópteros dejando caer a soldados armados contra un montón de gente inocente. No sabía que pasaba y mucho menos el porque de todo esto. En un abrir y cerrar de ojos sentí como mi cuerpo se entumecia y caía al suelo, cuando logré reaccionar vi que lo que me aturdió fue una fuerte explosión cerca de mi. Fue un tanque que disparo al edificio del otro lado de la calle pero la onda expansiva me logro golpear. De un solo movimiento me trate de levantar para escapar como las demás personas pero me fue imposible. A Mi pierna le habían caído escombros y me la había fracturado no podía hacer nada para salvarme y dicho y hecho, a solo un segundo después de pensar eso, un soldado ruso me disparó. Me dejó desangrando sin nada más que ver pasar mis últimos momentos de vida. Quería hacer tantas cosas antes de morir, pero bueno supongo que la muerte siempre nos llegará a todos en algún momento y de formas distintas, por lo menos en mi caso en una invasión extranjera. De lo único que me arrepiento es de no haber podido despedirme de mi madre..
