༆𝒀𝒐𝒖'𝒓𝒆 𝑷𝒆𝒓𝒇𝒆𝒄𝒕, 𝒎𝒚 𝒍𝒐𝒗𝒆.༆

𝑰 𝒍𝒐𝒗𝒆 𝒚𝒐𝒖.♡︎

Sonrió, la hice sonreír, y mi corazón se agitó de alegría. Su sonrisa, tan hermosa en su rostro perfecto. Sus mejillas alzadas hicieron sus ojos lucir más pequeños, y sus pestañas revoloteaban sobre su mirada, mirada que me dedica.

Sonrío también, mi corazón arde de amor. Mis manos se queman al acariciar las suyas, mi rostro se calienta y mis mejillas se tintan, la emoción y los nervios estallaban en mi estómago.

Mi corazón da un brinco cuando ella recuesta su cabeza en mi hombro, observo su lindo cabello suelto cual cascada, que se esparce en su cuello, sus brazos y su espalda.

Su tacto hace que olvide mi dolor, su voz hace que solo piense en ella, en nada más, solo somos nosotras, solo es ella ante mis ojos, dentro de mi corazón, unida a mi alma.

Noto como sus pestañas, antes quietas como una cortina negra cubriendo sus ojos, vuelven a revolotear en nerviosismo, las mías también, me observa, sus perlas tan brillantes, Dios mío, soy tan afortunada de merecer aquella brillante mirada. Sonríe con timidez, y sus mejillas se tiñen, su cálida mano acaricia mi ardiente mejilla, y acerca su rostro al mío.

Observo sus labios de un suave rojo natural, acercarse los míos. Me siento tan en paz, tan libre, tan enamorada.
Todo es tan perfecto, ella es tan perfecta.

El viento primaveral, su estación favorita, es tan suave como sus pétalos sobre los míos. El beso es tan pacífico, silencioso, como la lágrima que escapa de una de mis perlas, la cual cae en su mano y la humedece.

El beso acaba y mis ojos se abren como si hubiera despertado del más hermoso sueño. La adoro con la mirada y el corazón, ella me adora con su sincero amor. Mi corazón está tranquilo, tan tranquilo como su pulgar retirando la lágrima de mi mejilla.
Se dedica a acariciar mis mejillas, me dedico a acariciar sus manos.

“Te amo”

Es lo que salió de sus pétalos rosados, embellecidos por la luz de la primavera, y su melodiosa voz. Y es lo que dije en respuesta también.

Nuestras manos se unieron, nuestros corazones y almas se aferraron.
Nos miramos, y desde ese momento, no dejamos de amarnos.