Tal vez

Parte Única

La escuela se encontraba casi en solitario ya que la mayoría de hechiceros estaban ocupados con sus correspondientes misiones. Gracias a eso el ambiente era frío, sumando la oscuridad de la noche. Itadori el cual ya era un hechicero de categoría especial cursaba su último año en el recinto. Caminaba en silencio por los pasillos, no lograba conciliar el sueño y creyó que una vuelta por la escuela no le vendría mal. Al caminar por los pasillos se da cuenta de la poca iluminación de los mismos, puede que sea de los hechiceros más fuertes de su generación pero sigue siendo humano así que pasillos oscuros y la iluminación tétrica era digno de darle algo de miedo, aún así siguió con su paseo sin problemas. Se empezaba a preguntar si alguno de sus compañeros se encontraba en la escuela, era su día libre y pasó todo el día holgazaneando en su habitación, si había llegado alguien no se entero. El pelirosa sube a un gran balcón que había en el edificio principal para admirar la noche en todo su explendor pero al parecer alguien se le había adelantado puede reconocer esa silueta que se encontraba contra luz de la luna a kilómetros.

—Kugisaki.— menciona tratando de captar la atención de la castaña

—Oh Itadori, ¿que haces aquí?— dijo con algo de sorpresa en su expresión.

—Lo mismo pregunto, en mi caso sólo no podía dormir. — posicionándose a un lado de ella.

—Ya veo, es tu día de descanso pero no veo que lo estés disfrutando. — lo mira brevemente para luego seguir mirando el paisaje.

—Es solo que es un poco aburrido sin nadie con quien compartir el tiempo libre. — dice algo bajoneado.

Itadori se fija un poco más en el vestuario de la chica la cual solo vestía un short rosa palo para dormir  y una blusa blanca de tirantes que dejaba ver sus hombros y delgados brazos, si la sigue mirando parecera un pervertido pero tiene que admitir que su compañera le quedaba bien lo que sea o al menos eso pensaba.

—Pensé que habías salido a algún lado, yo terminé rápido con mi misión pero mi teléfono se rompió en un descuido. — dijo enojada lo ultimo.

Nobara seguía siendo de primer grado, sus habilidades no lograban llegar al grado especial y eso Itadori lo sabía, sabía que le costaba un poco más el ritmo de las misiones que a él o Fushiguro pero se las apañaba con enemigos más fuertes usando el "Black Flash" que pudo dominarlo a muy buen nivel aún así le molestaba no progresar igual de rápido que los demás.

—Suerte que solo fue tu teléfono, me alegra que estés bien. — la mira con una cálida sonrisa.

—Uhg, si como sea. — mira hacia otro lado tratando de ignorar los saltitos que da su corazón.

Itadori se ha percatado que cada vez que le sonríe o alaga a la castaña ella intenta apartarlo o evita mirarlo, no es el más inteligente pero sabe que es el único con el que reacciona así, eso lo hace feliz sea cual sea la razón.

—¿Es una linda noche no creés?— volviendo a mirar el paisaje.

—Oye deja de decir esas cosas ni que fuera una novela romántica, que raro eres a veces encerio.— lo mira con indiferencia y burla en su voz.

—Solo trataba de seguir la conversación.— se defiende el pelirosa.

—Hay maneras de seguir una y eliges la peor. —

—Con lo linda que eres nadie creería lo pesada que puedes ser a veces. — apoya ambos brazos en la baranda dando la espalda al paisaje.

Eso último dejo un poco descolocada a
Nobara pero no se quedaría sin hacer nada, el idiota le acaba de decir linda sin siquiera inmutarse, también se había dado cuenta de la mirada inspeccionadora del chico hace un rato, el tonto la había mirado tan descaradamente pensando que no se daría cuenta.