Af Akibel
Af Akibel se miraba en el espejo acomodando su pequeño moño, parte del uniforme de Babylis, una y otra vez, insatisfecho de como quedaba. La verdad es que nada tenía que ver con el moño que no estuviera satisfecho de cómo se veía, cada día de su vida desde que podía recordar había odiado el reflejo en aquel ornamentado espejo.
Pequeño, con la piel verdosa, cíclope, pero no uno aterrador como debía esperarse de cualquier demonio, no, su único ojo, era enorme y brillante de largas pestañas rizadas. Tierno le había escuchado decir a su madre más de una vez.
¿Por qué todos en su familia parecían tan orgullosos de verse como muñecos de felpa? Nunca lo entendió y conforme el tiempo pasaba y él crecía, seguía sin comprender. Había escuchado historias legendarias que involucraron a los antepasados de su familia peleando y ganando, cuando los demonios vivían sin ley y sólo el más fuerte sobrevivía. Un sinsentido total.
Daría todo por parecerse a la presidenta estudiantil, de físico y aura imponente. La admiraba demasiado aun antes de que le salvara la vida. Si él lograra que una demonio como ella se enamorase de él , su descendencia sería imparable y él por fin tendría el respeto que siempre había merecido y añorado. Sin embargo, todo se fue al carajo cuando echó a perder la pócima de invisibilidad de Bael, lo único que lo confortaba era que nadie sabía que él era el culpable de aquel rotundo fracaso. El solo imaginar que la presidenta se llegara a enterar lo ponía mal, podía soportar vivir esa vida miserable, pero que la demonio que más admiraba creyera que era un perdedor, eso era simplemente demasiado para poder tolerar.
Haría un nuevo plan y encontraría la forma de entrar al consejo estudiantil. Debía hacerlo, quizás toda su existencia dependía de ello.
Akibel nuevamente miró el espejo, suspirando audiblemente se resignó a ser un día más "el más adorable de los demonios'', pero eso solo sería hasta que él hallará la forma de revertir tal tragedia.
Iruma
Colándose hábilmente a través de las elegantes y rojas cortinas la luz del nuevo día, le molestaba. Iruma había tenido el más vívido sueño que recordara desde su llegada al Inframundo o quizás, incluso antes.
En su viaje onírico, la esencia vital de Amelie -san y la suya habían intercambiado de cuerpo. Un absurdo.
Iruma se revolvió entre las mantas de la enorme cama totalmente consciente de sí mismo, sin embargo, no deseaba levantarse. Ciertamente nunca había sido perezoso y, de hecho, sus viejos hábitos lo habían condicionado a abrir los ojos apenas hubiera un asomo de luz, artificial o natural. Ya que en su vida antes del Inframundo, su deber era mantener a sus padres y para lograr ese cometido sus días eran muy largos mientras que sus noches de descanso, en exceso cortas.
Pero ahora que su pasado era un punto distante y borroso ajeno a su realidad, deseaba disfrutar la calidez y comodidad de estar simplemente respirando, acostado en aquel agradable sitio.
Así que la decisión pasó a ser obvia, envuelto en suaves y delicadas mantas que se le antojaban como nubes, Iruma no se movió ni un centímetro de su posición.
Sin embargo, el sonido de la puerta de la habitación abriéndose y pasos dirigiéndose directamente a su dirección, le expresaron al chico que probablemente su determinación no duraría en cuanto Opera -san se hiciera presente junto a él.
Así que haciéndose ovillo y envolviéndose aún más, Iruma tuvo la firme convicción de poder volverse invisible. No funcionó.
—Amelie -sama, buen día, Amelie -sama ...
Unas manos gentiles movían de manera delicada a Iruma, que a pesar de que aquel era un intento de "despertarlo" solo estaban logrando arrullarlo, haciendo más contundente su resolución de permanecer acostado. Lo que trajo de vuelta al mundo de los vivos al humano, fue el reconocer un nombre que no era el suyo dirigido a él. La voz dulce de aquella demonio le dio un golpe muy severo de realidad. Todo estaba pasando tal cual lo había soñado. Levantándose de manera hábil y veloz, lo evidente se hizo claro, su esencia vital era una intrusa en el cuerpo de la presidenta estudiantil de Babylis.
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Love Potion (IRUAME, MAIRIMA)
FanfictionEl resentimiento y la venganza nacen irremediablemente en un pequeño demonio dispuesto a usar cualquier medio para hacer notar su presencia. En medio de esta batalla por lograr un nombre y reputación en Babylis , la escuela más importante del Infram...