Capítulo 7

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Todo parece ir en cámara lenta desde que apareció Mark

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Todo parece ir en cámara lenta desde que apareció Mark. La palabra novia salió de su boca pero aún no estoy segura de sí escuché bien.

—¿Novia? —pregunto al mismo tiempo que Ava.

—Claro que sí—sonríe y rodea mis hombros con su brazo haciendo que me tense en seguida.

Cuando pensaba que nada podía sorprenderme más, sale con esto. Miro a Ryan y fuerzo una sonrisa.

—Discúlpenos un momento—digo poniéndome en pie.

Tomo la mano de Mark y él se aprovecha entrelazando sus dedos. Lo saco del comedor y de reojo observo la mesa en donde estábamos. El amigo de Mark, Sebastián, se sienta junto a Ava y le sonríe coqueto, ella suelta una risa y yo ruedo mis ojos. «Traidora».

Llegamos a unas bancas vacías y me siento, Mark hace lo mismo y toda la confianza que parecía tener hace tan solo unos minutos, desapareció.

—¿Así que tu novia? —cruzo mis brazos y alzo mis cejas.

Suelta una risa nerviosa y sacude su cabeza.

—Fui un idiota...

—Sí, lo fuiste—lo interrumpo alzando la voz—. No sé qué rayos pasó contigo, pero no vas a venir aquí y fingir que somos novios de la nada. No soy un juguete, Mark. Ya conseguiste lo que querías.

—¿Conseguí lo que quería? —frunce el ceño y me mira sin entender.

—Meterte entre mis piernas.

—Alyssa, no solo quería sexo—contesta en un tono dolido—. Y no quiero fingir que somos novios, yo quiero ser tu novio. La cagué, no soy perfecto y sé que me comporté como un imbécil. Pero también tengo mi mierda y...—suspira pasándose la mano por su cabello—. Pero ya está, no tengo dudas.

—¿No tienes dudas de qué? —pregunto con un nudo en la garganta.

—De que quiero estar contigo—se acerca y en una caricia lleva su mano a mi nuca enredando sus dedos en mis rizos. La piel se me eriza ante su suave pero decidido toque, Mark acerca su rostro y pega su frente a la mía—. No solo vine a decirte que quiero que seas mi novia, vine a pedirte perdón y a asegurarte de que no volverá a pasar.

Mis labios tiemblan y aunque una parte de mí quiere creerle, dudo.

—No estaría aquí si no me importaras—susurra—. Quiero seguir conociéndote y quiero...

Lo interrumpo con un beso. Un beso que no pensé, que no planeé pero que sin embargo, se siente de maravilla mientras cierro mis ojos y me dejo llevar. Mark no pierde tiempo, aprieta el agarre en mi cabello y me presiona contra él acortando la poca distancia.

Ya no es suave, tampoco lo soy yo. Nos dejamos llevar en un beso apasionado en el que nuestras lenguas se juntan, nuestros cuerpos se aferran y respirar pasa a segundo plano.

Quiero que tú quieras [Elbdo #2] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora