Seres mitológicos || Namjin +18 (TERMINADA)

Capítulo 33

La ninfa parte dos

- Llevo una semana buscando la ninfa correcta, una que no le de miedo romper las reglas y creo que la encontré. -

Los tres seres iban caminando por el bosque en dirección a donde algunas ninfas tenían lugar en el mundo.

El hechicero había investigado por su parte durante siete días enteros para poder encontrar a una que, si llegara a faltar en este mundo, no haga mucho daño a posterior, al saber que este ser moriría, tenía que ser cuidadoso, quería causar el menor dolor posible.

El problema estuvo en que en aquella visión no logró ver el rostro de la fémina fallecida, sus visiones luego llegan a ser borrosas, lo único que logró notar fue el cabello negro como madera de ébano, así que no fue tan difícil encontrar a una joven con estas características, puesto que la mayoría de ninfas suelen tener cabello bastante claro.

Pronto los tres chicos arribaron a una vieja cabaña de madera bastante gastada, se encontraban en un lugar aislado de las demás casas, hasta parecía estar deshabitada, lo único que resaltaba en aquel espacio eran las plantas que se hallaban perfectamente cuidadas, dando a entender que una ninfa vivía ahi.

- ¿Cómo comenzaremos la conversación? - Preguntó Jin, deteniéndose junto con sus acompañantes.

- Sin dudar las cosas, vamos de una. - Respondió el demonio caminando con confianza hacia la entrada de aquella cabaña.

- Namjoon no puedes... - El grito del demonio interrumpió lo que el hechicero estaba por decir.

Aquel grito fue causado por un par de largas lianas que desendieron desde un árbol atando al príncipe infernal y levantandolo del suelo, por más que forcejeó no logró zafarse, aquellas lianas eran muy resistentes.

- No puedes acercarte así a la casa de una ninfa. - el hechicero terminó aquella frase inconclusa y soltó un largo suspiro escuchando después la risa del vampiro quien se acercaba a su pareja para poder burlarse a gusto. Pero esto solo provocó que el cayera en la misma trampa, siendo inmovilizado al igual que su adverso. - Tal para cual. -

El hechicero ignoró a sus adversos y se puso de rodillas junto a una pequeña y bella flor blanca que yacía sola en el suelo, la acarició con delicadeza y le susurró con voz dulce un "No somos atacantes, ¿puedes salir para conocernos?"

Aquella flor fue tragada por la tierra, desapareciendo de un solo movimiento. Una pequeña protuberancia apareció en la tierra justo donde la flor estaba anteriormente y se movió con rapidez hacia la cabaña.

Hoseok se levantó con una gran sonrisa en su rostro, se mantuvo de pie en su lugar y pronto la puerta de la cabaña se abrió permitiendo ver a una bella y delgada joven de cabello largo y negro, esta miró directamente al hechicero de arriba a abajo, pronto asintió con la cabeza dándole a entender al joven que le había permitido acercarse.

Hobi avanzó tranquilamente hacia la femina, quien no decía nada, a pesar de recibir un saludo por parte del joven.

- Mucho gusto bella ninfa, mi nombre es Jung Hoseok y soy un hechicero, vengo a hacerte una propuesta que podría llegar a interesarte... que por cierto, esos chicos que inmovilizaste vienen conmigo, son mis amigos y no harán nada perjudicial. -

La ninfa llevó su mirada hacia los chicos colgados quienes no dejaban de discutir entre ellos sin darse cuenta de que la fémina estaba presente. Ella levantó su mano derecha chasqueando con sus dedos. De inmediato las lianas soltaron a los chicos dejando que cayeran al suelo causando un seco sonido como consecuencia a sus caídas, seguido de sus quejas de dolor.