𝔊𝔬𝔱𝔞𝔰 𝔡𝔢 𝔞𝔤𝔲𝔞 𝔡𝔲𝔩𝔠𝔢 [Terminada ✓]

26. Gracias

Seguimos en el concierto, está a punto de acabar. El ambiente se puso muy bueno a decir verdad. 

Angela ganó un disco ortografiado por contestar algunas preguntas que el cantante le hizo. 

Suena la última canción "Kumbala" es mi favorita y hoy descubrí que la de mi bicho por igual. 

"Desde el amor, para el amor, por el amor, para todos los que están enamorados, está noche" 

Cuando rocopachukote dice eso, Angela me mira con sus ojos llenos de ilusión. Estoy nervioso después de este gran concierto haré algo que cambiará la vida de ambos. 

El saxofón es el primero en escucharse, yo me quedo mirándolo deleitándome de la buena melodía que esté transmite. 

La gente grita y eso es una de las mejores experiencias de la noche. El saber cómo como una simple canción puede transmitir tantas emociones. Es como lo que dicen, que un beso dice más que mil palabras, bueno, eso mismo pasa con la música. 

En el escenario está plasmada la frase "Baile Kumbala bar" con un color rojo neón. 

Angela sigue los pequeños pasos de Roco, se mueve al mismo ritmo que él. 

<<Y en la pista una pareja se vuelve a enamorar>>

Yo no me estoy volviendo a enamorar más bien, me estoy enamorando, me estoy enamorando de ella, porque conmigo demuestra quien es en verdad, porque tiene un buen corazón, un corazón que se muere por dar amor y yo estoy dispuesto a qué me entregué todo ese amor así como también yo le daré mi amor. 

La música si intensifica y todos brincamos a ese ritmo. 

—Esooo —me grita Angela.

No digo nada, solo me río y sé que mis mejillas están ardiendo, ya que es la primera vez que hago algo como esto. 

Roco comienza a despedir a todos los músicos demostrando que instrumento toca cada quien. 

Música y pasión
Música y pasión
Música y pasión... 

Música y pasión
Música y pasión 
Música y pasión... 

De esta manera termina el concierto, Angela voltea a verme —Gracias, en verdad gracias por esto, es la mejor noche de mi vida, te amo —habla demasiado rápido por lo cual no entiendo nada de lo que me dice. 

—¿Qué hemos dicho sobre dar las gracias?  —trato de ignorar lo último que dice para ver su reacción. 

—Lo sé... Perdón, pero es que esto es lo mejor que pudiste hacer por mí —se pone de puntitas y deposita un beso en mi mejilla. 

—Bien, vámonos —trato de entrelazar mis dedos con los de ella, pero de inmediato pone su mano en un puño y solo se engancha de mi brazo. Ok, esto no estaba en mis planes. 

Salimos del lugar en donde fue el concierto en silencio. 

—¿Quieres ir a algún lado? —hablo rompiendo el silencio.

Ella niega con la cabeza —Nop, nada más quiero ir a casa. 

—No, no te llevaré a casa, vamos a comer tacos, tengo hambre. 

—Puedes ir solo tú, ya sabes en donde los venden.

Auch, bueno, yo tuve la culpa de que se comporte así. 

Niego con la cabeza y en cuanto menos se da cuenta la cargo como si fuera un costal de papas, sinceramente ella no pesa nada.

—Gregory Tyler bájame de inmediato de aquí o... Llamaré a la policía —grita mientras da unos golpes en mi espalda. 

—Hazlo de todas formas llamaría a mi abogado para que pague la custodia y me dejen salir en menos de dos horas —le hago una broma.

—No es gracioso, Tyler, bájame. 

No hago caso a lo que me dice y solo sigo caminando hacia el puesto de tacos, muchas personas nos miran con cara de ¿Y a estos que les pasa? Angela aprovecha esas oportunidades para decir "Me está secuestrando, ayuda" pero noto que nadie le hace caso. Ahora veo que lo de la inseguridad en México es muy cierta.

Llegamos al puesto de tacos y la siento sobre una banca —Para mí no pidas nada. 

—Claro que lo haré, amas estos tacos, no te puedes resistir a ellos. 

No dice nada, solo me fulmina con la mirada y yo la miro divertido. 

Camino hacia el chico que está ahí para pedir mi orden —Dos órdenes de tacos al pastor por separado por favor. 

—Claro que si Greg, es lo mismo que llevas siempre —me dice el chico, claramente él ya me conoce porque no es la primera vez que venimos a comer aquí —¿Y Wilson en donde está? 

—Por allá —hago una seña con mi cabeza —Está enojada porque ignore su "Te amo" —el chico me mira mal —Tranquilo, esto es parte del plan —le guiño un ojo —Necesito que pongas esto debajo de los tacos —le entrego la hoja en donde escribí el "gracias"

—¿Qué? —me mira confundido. 

—Yo sé lo que hago, por favor no preguntes hazlo —le hago ojos de perro. 

—Ok, pero si Wilson viene a matarme no podrán volver a venir a comer tacos.

Después de unos minutos el chico me entrega los tacos —Estos son los de Angela. 

—Gracias ahora estate atento de lo que haré.

Me retiro de allí y me dirijo hacia Angela, ella está con sus manos entre su cabello como si estuviera desesperada —Aquí están tus tacos. 

Ella me mira molesta —¿Son como me gustan? 

—Tal y como te gustan. 

—Solo porque tengo hambre te los acepto —ella comienza a comer sus tacos —¿Gracias? —dice cuando mira el papel. 

Yo le regaló una sonrisa —Eh... Si gracias.

—¿Qué tipo de broma es esta? ¿Tuya o de Aliel? 

—Mía, pero no es una broma. 

Mueve su cabeza dándome una seña de que no entiende.

—Yo... lo más probable es que te vuelva loca, en serio, te golpearas la cabeza contra las paredes por mi culpa, te lo aseguro, tendremos peleas como en una guerra mundial —hago una pausa y ella solo me mira con detenimiento —Golpearemos las puertas, nos aventaremos limones, destruiremos la casa, derribaremos todo lo que hay dentro de ella, quiero decir... tendremos algunas peleas muy ridículas —ella me mira con una pizca de diversión. 

Después de unos segundos habla —Impresionantemente romántico ¿Alguna otra advertencia? —me regala una sonrisa. 

—No... —suelto una pequeña risa nerviosa —Solo trato de decir que no soy un chico fácil de llevar y por lo que veo tú tampoco eres una chica fácil —estoy hablando mucho que ya me canse —Quiero decir... tenemos buenas razones para no hacer esto es decir ¿por qué nos molestaríamos así? Que ridículo, ¿no crees? Pero tal vez hay una muy muy pequeña, casi nula y mínima posibilidad de... de que seamos felices —nuestras miradas se cruzan. 

—Acepto Jirafa —se para y me abraza mientras que yo depósito un beso sobre su cabeza.

—Por eso gracias. 

—¿Estabas seguro de que diría que si?

—En realidad no, si decías que no tenía que inventar algo súper random para no quedar en el friendzone —hablo riendo. 

—Esta es la declaración de amor más rara y bonita que he visto en toda mi vida —habla el chico. 

Y así desde esta noche nuestra amistad cambio a una relación.

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