* CAPITULO 8 *

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En serio paul. ¿en que demonios estabas pensando?.

-         Estudiaras, ganaras experiencia en las expediciones, y ganaras dinero con tus logros adquiridos. No puedo esperar a ver en el hombre que te convertirás. – eran las palabras escritas en la carta que paul había escrito. Mientras tanto yo, aquí estoy, sintiéndome más decepcionado de paul y su exagerada decisión. ¿Cómo demonios se le ocurrió mandar a trabajar a rudeus, mientras a mí me envía a quien sabe dónde?

No pude evitar recordar con un suspiro mi situación. Hace unas horas, había estado luchando contra paul en un duelo de rutina, típico esparring para alentar el momento. Pero de un momento a otro, paul se había puesto extraño, y de repente, arremetió contra mi, y me dejó noqueado. Lo siguiente que pasó fue que había despertado de mi forzada inconciencia para darme cuenta en que me encontraba en el interior de una  carreta que hacia estragos en mi espalda. Por dios que juro que inventaré las suspensiones si vuelvo a montar una carreta. Por otro lado, no puedo evitar recordar esos detalles.

-         Bueno, hijo. ¿te encuentras bien? – había escuchado la voz de un señor de bastante edad en ese momento. Este andaba solo, y llevaba atuendos algo pomposos que dejaba a la vista su considerable estomago entre su ropa algo llamativa. Sin embargo, por lo tradicionalmente simple que era la carreta en la que me encontraba, pude deducir que no se trataba de algún noble. En ella también se encontraba otro señor que acarreaba la carreta, alguien que parecía ser un vendedor de vienes. Al parecer, se trataba de algún comerciante que había alquilado un conductor.

-         Si. – dije, mientras me levantaba de la banca larga en la que me encontraba recostado. Por la fuerte tencion que sentía a través de mi torso y brazos pude notar con claridad que me encontraba sujetado con cuerdas. Cuerdas muy fuertes. Un tic de molestia se apoderó de mi por las locuras de paul. Mirando hacia el comerciante que me miraba con algo de preocupación, intenté organizar mis pensamientos para recopilar información. – ¿donde estamos?, ¿Cómo terminé aquí? – pregunté. El sudor fresco recién apareció alrededor de la frente del comerciante cuando se había perturbado por algo momentaneo.

-         Bueno, hijo. – dijo, sacando un pañuelo para secarse la frente. – el como apareciste aquí, se debe a un hombre extraño. Me dijo que te lleváramos hacia la ciudad de fedora, en la región central del reino de ashura. Esta a unas horas de nuestra ruta, pasamos desde roa por el camino que conecta con el pueblo de boona. Ahora vamos hacia la segunda capital mas importante del reino. – dijo, mientras protestaba algo sobre que le daría un infarto si presenciaba otra locura mas de este reino de perversos. No pude evitar estar un poco exasperado ante lo que estaba pensando. ¿acaso paul había hecho algo mas loco?

-         Por casualidad, - sugerí. Aun no creía que algo como en lo que estaba pensando pasaría. No cuando mis padres eran muy discretos con las habilidades antinaturales que dominábamos casi todos en la casa. – ¿un hombre no desendió del cielo y le dijo que me llevaran a una academia de esgrima? – pregunté, sin poder creer que algo así pasaría. Sin embargo, por las expresiones del comerciante, no pude evitar dejar salir un suspiro de resignación. Tal vez mi padre no era el mas inteligente de todos. Era de sentido común que a un niño no se le dejaba a la suerte por el amor a dios.

-         ciertamente, muchacho. – el comerciante dijo, mientras me entregaba una carta. Una carta que no podía sujetar, así que simplemente me lo dejó a un lado junto con un pergamino sellado. – y asumo que aquel hombre del cielo se trataba de tu padre, ¿no? – preguntó con comprensión.

-         Si, - confirmé. – es mi padre. No es, tan discreto y rigurosamente disiplinado para ser un caballero. Aunque es muy joven, de todos modos. – dije, pensando en lo joven que se veían sus padres. En algúna vida ellos pudieron ser considerados mis tataranietos. En alguna vida en donde me di la oportunidad de ser un hombre de familia.

¡¡LA SEGUNDA VIDA DE UN HEROE RETIRADO!! (izuku en mushoku tensei).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora