¡ESTE NO ERA MI SHIP!

Parte II: Sólo una vez.

Habían estado la tarde entera flojeando- Gaspar se había tomado el día para poder ayudar a Iggy a re-acondicionar un espacio para él.
Desgraciadamente Los atiborrados espacios estaban llenos de materiales nuevos para el trabajo del propio goth quien había hecho esfuerzos por maximizar el espacio que tenían disponible tanto en su habitación como en otras áreas de la casa.

Recordando colocar las cosas que dejaban en su casa por si cualquiera se quedaba uno o dos días bien accesibles. Iggy lo seguía y ayudaba, pero en algún punto se apenó puesto que pensaba que era mucho lo que de por sí Gaspar estaba haciendo.

"Ah- d-dejame yo continuo. No falta tanto de todas maneras y uhm..." Su mano se extendió para tomar la taza que sostenía Gaspar. La tomó y lo miró al rostro un momento, pero en nada desviaba la mirada nervioso. Otra vez recordaba esas miradas que Gaspar le dio en ese desgraciado sueño.
Esta había sido quizá la décima vez que pasaba, tal vez había sucedido más veces sin que se diera cuenta. Apenas podía sostenerle la mirada.

Gaspar le sonrió, gentil como siempre. "No te preocupes- además es divertido, es como si- Como si estuviéramos mudándonos juntos." Bromeó y rio ligeramente. Iggy se congeló unos segundos y se sonrojó y su nerviosa risa apenas audible fue acompañada por su mirada baja.
El goth se alejó un poco, solo para ir por su propia taza, y la colocó al lado de la taza de Alien de Iggy. La taza, completamente negra con un metálico estampado del dibujo de un gato. Negro como sus adorables criaturas, líneas trazadas en dorado.
Suspiraba pensando en su propia mascota, relegada al espacio que le habían asignado para mantenerla un poco alejada de los mininos.

 
Aunque en su mayoría eran calmados, ocasionalmente la pobre chinchilla era sorprendida por la mirada fija gatuna sobre esta. Era inevitable que la criaturita ocasionalmente se escondiera de ellos y que los mismos gatos curiosearan su espacio.
Así que la movieron, a una altura considerable al menos hasta que pudieran ubicarle un lugar.
Ensimismado en sus pensamientos- no se percató que estaba tocando la taza de Gaspar- sus dedos trazando la orilla del mango.

"Te gusta? Te puedo pedir una igual." Le dijo en esa voz calmada. Iggy regresó a la tierra.
"Ah- Ah está bien así..." Sonrió de lado. "Solo, me gustó el color del estampado."
Y se alejó un poco. Se había dado cuenta que Gaspar lo miraba directamente, apenas a una cuarta de distancia. Esto le puso más nervioso y se fue a sentar por la barra de la cocina.
"Creo que deberíamos comer- estuvimos ya un buen rato en esto, eh- ¿Quieres ver algo mientras comemos?" Iggy trataba de cambiar el tema y tratar de distraerse. Quizá acostumbrarse a estar tan cerca de Gaspar y demás no era tan mala idea. Pero le costaría.

 
"Claro- Podemos buscar alguna de las películas que tengo guardadas y-"
A la distancia- se escuchó un pequeño ruido. Algo caía en la habitación de Gaspar-
Sonidos de sus gatos- Siseo y maullidos agresivos. Sin decir nada- y en sorpresa- corrieron a la habitación, Iggy preocupado por su mascota y Gaspar con algo de sorpresa y preocupación ya en el rostro.
Al asomarse por la puerta, ambos al mismo tiempo, apretando el espacio para ver que había sucedido- Vieron que solamente había caído de un buró y rodado por ahí, una de las lámparas de noche de Iggy- Y ambos en alivio absoluto suspiraron tras ver que Alfy se encontraba bien y donde la habían puesto. Pero entonces notaron que los gatos estaban todavía gruñéndose, y uno de ellos arrinconado al lado de la lámpara. Seguramente había sido este el perpetrador.
En seguida Gaspar actuando ya como un enojado padre- les habló en voz más alta y algo molesto-
"HEY USTEDES- SEPÁRENSE. DEJA A MELCHOR EN PAZ BAL-" Frase incompleta- Baltazar, sombra ágil, corría al escuchar la voz alta de Gaspar. La respuesta automática e inconciente de Iggy fue tensarse. Su cuerpo estaba reaccionando cada vez más fácil a la voz de Gaspar y eso no le estaba gustando.

 
Quizá era parte de sus padecimientos- que lo tenía tan emocionalmente responsivo.
"Ah- ah-" Salió de su boca, pero no pudo decir más. Baltazar huía de la escena y corrió a su lado para salir de la habitación. Gaspar en un acto más de reacción automática que otra cosa- se acercó rápidamente para intentar alcanzarlo, pero su gato se dio a la fuga a esconderse por algún lugar en la sala.
Con un brazo sobre el marco de la puerta, y el otro muy cerca de Iggy- se giró y le sonrió pidiendo disculpas suavemente. Tenerlo tan cerca otra vez. Tragó saliva y asintió.
"No te preocupes- Está bien- no pasó nada." Y trató de alejarse, fue por su lámpara aún en el piso y la recogió.
Se tiró un momento en la cama y suspiró, con la lampara aún en la mano.
Gaspar le siguió. Puff! El sonido del cuerpo de Gaspar a su lado y su risa. Iggy desvió la mirada a otro lado. Gaspar miraba hacia el techo.