Capitulo 12

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-Kokonoi, Ran Haitani, Rindou Haitani, Inui... ¿Kuroro? -cuestiona inseguramente- Sanzu y Chifuyu...

-Confiare en el juicio de Takemicchi - murmura el rubio con aburrimiento - solo ofreceré a esos dos en la lista.

Curioso, nunca pensé estar algún día en tal posición, teniendo tal confianza de Mikey-kun, estando a cargo de poner personas de confianza para su beneficio.

-Kuroro, ¿Por qué él? - indaga el otro acomodando sus lentes.

¿Por qué?, La razón es sencilla, ha sido mi apoyo incondicional desde hace mucho... Merece estar aquí.

Esa sensación extraña vuelve; momentos de lucidez, cosquilleo en el cuerpo, esa confusión repentina y luego... oscuridad total, como si todo se hubiera desconectado.

"Eres demasiado aburrido niño" escuchó detrás mío, en medio de toda aquella oscuridad, como si una persona estuviera aquí... y si, puedo distinguir su silueta a lo lejos, es difícil de visualizar, pero allí está, y es lo último que veo, pues cuando desaparece dejó de ser consciente de mi mismo.

****

Takemichi no lo sabe aún, ha perdido la capacidad de dominar su cuerpo, ha tenido un huésped inesperado viviendo en su cuerpo durante algún tiempo. ¿Hace cuanto?, Dios lo sabrá, o tal vez no...

¿Está bien hablar de dios cuando hablamos de términos científicos como lo son viajes en el tiempo?, se supone que no se juntan, se repelen como agua y aceite. Pero quizá... las personas atribuimos lo magnifico a la fantasía, quien sabe, quizá pueden estar más ligados de lo que pensamos, después de todo, esta de aquí podría ser la situación.

Pero así es, el lindo y adorable rubio teñido vuelve perder el control de su cuerpo, ni siquiera es capaz de intervenir o ver la situación, ha caído en un ligero sueño, a saber cuando volverá a despertar...

De momento solo somos capaces de presenciar lo que ocurra...

-¿Hay algún problema con mi recomendación? - cuestionó con tono adormilado - escupe de una vez el problema que tengas con mi mano derecha Kisaki.

-Se escabulle por demasiados lados, su actividad es demasiado sospechosa, podría planear traicionarnos, darle el privilegio de ser un ejecutivo le dará más acceso a nuestra información.

La risa seca que sale de mis labios hace que mi interior se renueva con miedo, pobre pequeño, aún intenta luchar... ¿Qué pasa, quieres hacer algo? ¡Reacciona entonces!

-Kuroro es mi mano derecha, así como Hanma la tuya, así como Sanzu y Chifuyu se intercalan en serlo para Mikey. Brindar información es su deber, saber más que los demás los mantiene alerta para disponer su vida a nosotros, no parece importarte eso con tu perro faldero, deja el mío en paz- río- Es eso o.. ¿Tienes miedo de sus habilidades?.

Me levanto, rozando mi mano lentamente con la fina tela del mantel, el cristal destrozado cruje bajo mis zapatos, una verdadera pena, eran nuevos...

De las pocas cosas que aún quedan en la mesa, un lindo cuchillo de plata está en medio del viaje que mi mano transita. Es pequeño, pero afilado, encaja mi mano con perfección, y aunque las miradas de ambos individuos en el lugar han captado mi movimiento, ahí se quedan, sentados cada uno en su lugar, escuchando atentamente, pendientes a cualquier cosa que pueda pasar.

Llegó con lentitud, le rodeó, pasó mi mano por su espalda con diversión y terminó posando mi barbilla en su hombro derecho, su cuerpo queda igual, aun si con mi mano izquierda apuntó el lindo cuchillo a su cuello, no mueve un solo músculo.

Stealing my boyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora