|Capitulo 1|descenso a las pesadillas

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Ya habían pasado unos cuantos días desde que fesor le encargó cuidar de las peores amenazas que existen en el reino los fantasmas y boos sobre todo al rey de esas almas inefables; desde entonces le dan dado ataques de pesadillas cada noche y de todas ellas el protagonista era ese españolete fantasma -¡AaaaaaH! suéltame por favor- despertó de golpe sudando frío mas no poder a pesar que esa noche fuese calurosa, se sujeto del pecho y pasó su otra mano por su rostro y limpiar así el sudor que tenía -otra pesadilla mas... si sigo asi al rato empeze a mirar alucinaciones- miro su teléfono y observó que era relativamente de mañana así que decidió intentar otra vez y rezar que esta vez no fuese una pesadilla. Estaba en un hermoso campo abierto, comenzó a caminar pudiendo respirar ese fresco aire hasta que en medio del camino vio la luna oscura brillando tan fervientemente -por favor solo te pido una noche libre para poder dormir- susurro en lo que daba marcha atrás pero la luna brilló de forma resplandeciente tal que en un cerrar y abrir de ojo era de noche en ese campo, la luna se acercó al fontanero y le bloqueó el camino, evitando así que el chico no diese un paso más hasta que sintió un espeluznante frío en el cuello y luego sentir una lengua más gélida que el hielo mismo pasarle por el cuello hasta enrollarlo completamente; luigi no paraba de temblar al ver esos enormes orbes violeta con un brillo amenazador

-¿En serio crees que seré piadoso contigo? estupido bebito llorón de los cojones ya me tienes harto y la única forma para desquitar me es atormentandote en sueños- el enorme Rey fantasma hizo presión a su agarre escuchando una queja del chico el cual no paraba de temblar

«Ya estoy cansado de salvarte pero solo lo hago porque yo tambien habito aquí» hablo una voz similar a la del fontanero y de un solo impacto el boo desapareció dejando solo al chico con una figura similar a el pero de color verde oscuro el cual no se podia distinguir sus facciones «¿cuanto tiempo mas vas a seguir con esto? ¿Crees que es divertido escuchar tus lloriqueos todas las noches porque esa pelota blanca molesta te hace llorar? realmente estoy cansado incluso para mi y eso que yo no necesito descansar estando aquí dentro» extendió sus brazos causando que nuevamente el sueño volviera a la normalidad y voltea a ver al chico el cual seguía sentado en el suelo limpiándose unas lágrimas «como sea, me largo y espero que de una vez por todas quemes ese maldito álbum de mierda» la silueta desapareció dejando al plomero solo en su sueño

Llegó el amanecer y con ello el despertar del chico el cual despertó algo cansado pero se puso de pie y de forma automática se acercó al cajón de su mesita de noche y vio que allí estaba el libro, lo volvió a cerrar y empezó con su día, alistando se y bajando a la cocina para ver a su hermano el cual ya estaba preparando el desayuno -otra vez una pesadilla? Luigi estás seguro que quieres seguir guardando ese libro? estará más seguro resguardado bajo la vigilancia de la princesa y bien lo sabes hermano- le coloco un plato de comida y el chico con simpleza empezó a masticar la comida

-Si mario, esta bien asi, no quiero correr el riesgo que bowser un día decide secuestrar a la princesa y por accidente el libro termine en malas manos, ya sabes como es boo y no se detendrá hasta matarme o quien sabe lo que realmente quiere hacer conmigo ese fantasma- no hubo más palabras así que tuvieron un desayuno silencioso hasta que el hermano menor terminó y decidió salir y un momento a tomar aire fresco junto a su perro el cual con alegría lo acompaña -voy a salir un momento mario, tal vez un poco de aire fresco me caiga bien- Mario termino de lavar su traste y se acercó a Luigi

-Esta bien Luh, te voy acompañar y así pasamos un pequeño tiempo de hermanos ¿que te parece fratello?- Luigi sonrió y asintió, ambos hermanos salieron junto tal que ambos hermanos se divirtieron a más no poder en ese paseo pero por desgracia pasó, después de pasar medio día afuera de la casa entraron a su hogar con enormes sonrisas y alegría la cual desaparece cuando luigi volvió a subir a su habitación y volver a revisar el cajón

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