Líos de amor de una Malfoy [Harry Potter/Theodore Nott] TERMINADA

Eleanor y Logan (2° parte)

Eleanor Nott Black

La puerta de mi habitación se abrió lentamente, dejando ver a mi mamá con una esplendida sonrisa. Se quedó ahí, luciendo su vestido verde esmeralda veraniego, hasta que decidió hablar.

-¿Y qué tal?

-¿Qué tal con qué? -pregunté, ordenando la ropa que me llevaría a Italia.

-Hogwarts...

-Bien -le respondí sin mucho interés.

Mamá caminó hacia mi cama y se sentó en la orilla. Sus intensos ojos grises me quedaron observando.

-¿Qué pasa, mamá? -inquirí.

-Vamos, Ele, no creo que deba insistir. Cada vez que vuelves de Hogwarts llegas desanimada, pero esta vez no. ¿Pasó algo?

-Nop.

-¿Nop? -enarcó una ceja -¿Te hiciste amigos de tus compañeros de quidditch?

-Digamos que puedo tener practicas tranquilas con ellos, pero no.

-¿Y por qué llegaste distinta a los otros años?

La quedé observando, no estaba segura si era correcto contarle, pero había algo en mamá que me hacía confiar plenamente en ella, tal vez era el hecho de que sabía que me iba a entender. Caminé hacia ella y me senté a su lado.

-Tengo un amigo, mamá.

-¿En serio? -preguntó emocionada, a lo que yo asentí -¡Ele, eso es increíble!

-Sí. Su nombre es Logan.

-¿Y cómo es?

-Pues... simpático, divertido, muy bueno en el quidditch... Es un chico genial.

Mamá amplió su sonrisa.

-No sabes lo feliz que me hace que me cuentes eso. Podríamos invitarlo a cenar hoy, antes de que nos vayamos de viaje. 

-Ay, mamá, no, eso es vergonzoso.

-¿Qué? Es tu primer amigo en Hogwarts, quiero conocerlo -insistió.

-Y si no te molesta, yo quiero conservarlo. Eso no pasará si lo invito a mi casa para que mi mamá lo interrogue y nos saque una fotografía para pegar en la pared con un letrero que diga "El primer amigo de Eleanor".

-No haré eso -replicó de inmediato -Pero es un día importante, ¿no?

Rodé los ojos.

-Está bien. No lo invitaremos a cenar -repitió mamá haciendo su larga cabellera oscura hacia un lado -aún...

Solté una pequeña risa y me paré para seguir ordenando. Mamá también se paró, caminó hasta la puerta y me quedó observando desde ahí.

-Ele...

-¿Sí?

-¿Segura que es un amigo?

Mis mejillas me defraudaron tomando un color rojizo de inmediato, incluso antes de que nuestros ojos se conectaran. Ella tenía una mirada muy tranquila, hasta diría que pacífica, igual que su voz.

-Mamá...

-Cariño, quiero que sepas que me puedes contar esas cosas. No insistiré, pero... en realidad me gustaría que confiaras en mí. Tampoco es que tenga una exhaustiva experiencia con chicos, pero estoy segura que te puedo ayudar con cualquier duda que tengas.

-Logan es solo un amigo -le dije.

-Está bien -finalizó, o eso creí- Pero si quieres hablar, necesitas un consejo y todo eso, me puedes decir.