Entre nosotros(+18)

Me debes una

—Si,el problema está en que quiero follarte aquí mismo pero no puedo por qué como sabes —suelta una carcajada—eres mi hermanita.

Me quede sin palabras ante esa respuesta y enseguida sentí como mis mejillas se ruborizaron.

—joder qué es broma —exclama riéndose —sólo quería ver qué tan rápido te sonrojabas.

Mierda qué hermosa sonrisa tiene.

—ja,ja que chistosito —comentó con sarcasmo y finalmente salgo de la habitación.

Cuando salgo al pasillo veo a mi madre y a Edward entonces aprovecho y les pido qué me muestren mi habitación,acceden,así que abren la habitación que queda precisamente al lado de la de mi "hermanastro".

Noto que la habitación es bastante amplia y bonita, enserio tengo qué admitir qué al menos mi madre supo elegir bien con quien casarse porque a lo qué he visto Edward es adinerado y la casa es bastante grande y lujosa.

(...)

Después de acomodar todo en mi cuarto me doy un baño y decido bajar para conocer un poco el lugar donde voy a vivir toda mi vida digo hasta que cumpla los dieciocho años y me largué de aquí a vivir mi propia vida,no?

Bajo a la cocina en busca de un poco de agua y ahí me encuentro con mi hermanastro qué a cada momento qué lo veo me parece más sexy y a la vez molesto.

—Hola de nuevo hermanita —dijo con una sonrisa juguetona.

—Ahg ya de decirme hermanita—replique y luego me acerqué a el sin apartarle la mirada de sus ojos y el se veía tan relajando mientras estaba tan cerca de el y en cambio yo sentía mi corazón salirse por la boca.

—Me puedes bajar un vaso de ahí por favor—dije señalando el gabinete que está detrás de el y que claramente yo no alcanzaba ya qué soy muy pequeña.

—No,mejor te voy a ayudar a para qué cojas uno —dijo y después se puso detrás de mí me tomó de la cintura con sus grandes manos y enseguida sentí mi cuerpo estremecerse ante su tacto, después me alzó así que abrí la puerta del gabinete y tomé el primer vaso que vi luego el me bajó.

—Gracias por ayudarme con el vaso—dije con una sonrisa amable.

—Ahora me debes una—me guiño el un ojo y antes de qué yo le pudiera decir algo salió de la cocina.

Como qué le debo una,a qué mierda se refiere con eso,no me digas que por ayudarme a bajar un puto vaso ahora le voy a deber un favor a ese idiota.