Irnos [YOONMIN]

Único

Algún día -ojalá no sea un domingo- vas a dejarme.

Te irás sin voltear la mirada, con las piernas firmes y la espalda recta.

Lo descubrí hace unas semanas, pero creo que tú lo has sabido desde hace mucho tiempo atrás.

Aún trato de descifrar si el pensamiento cruzó tu mente cuando coloqué un anillo en tu dedo. Si en nuestra noche de bodas pensaste que nuestra unión tenía fecha de caducidad.

Dime Jimin, ¿Cuánto tiempo has ocultado en tu espalda el arma lista para partirme en dos?

Esperas que al irte, te pida explicaciones que no quieres dar. Lo sé porque escuché tu conversación con Taehyung -que irrespetuoso de mi parte, y por eso me disculpo-, pero no debes preocuparte, no te pediré nada que no quieras darme.

No es por compasión, al menos no por ti. Después de todo, soy yo quien la merece.

Pasé la etapa de los llantos y porqués hace unos días, ¿fue un martes? Me paré frente al río Hann y grité "¡Dame una razón!", pero no hubo respuesta. El agua permaneció inerte, el viento siguió tan frío como se espera de un noviembre y las aves continuaron su vuelo.

El mundo no se detiene porque un hombre ha descubierto una infidelidad.

Si ese es el caso, ¿por qué debería detenerme yo?

Sabías que todavía dolían las cicatrices de cuando me separaron y aun así decidiste rascar sobre ellas.

Por eso ahora, mientras me observas escribir en el ordenador, he decidido ser yo quien establezca las reglas de cómo terminará este juego. Sabes que ya ganaste así que, ¿Cuál es el punto de seguir llevando la cuenta?

Sé que ya has notado la maleta bajo la cama, pero no te atreves a preguntar para qué es, ¿no se supone que mi último viaje de trabajo fue hace tres meses?

Cuando leas esto Jimin, ya no estaré en Seúl.

No estaré porque no quiero escucharte.

Si te conozco como creo, tratarás de contactarme, pero la contestadora te dirá que el número es inexistente. Los correos llegarán a una cuenta que no tiene dueño y las redes, en las que escasamente actualizo, estarán bloqueadas para ti. 

Min Yoongi será un extraño. 

Pero no te confundas, quien me está dejando eres tú.

Esa es la historia que voy a contar, y no podrás cambiarla porque ya me habré encargado de que nuestros amigos se enteren, ¿nuestros?, quise decir: mis amigos. Después de esto, no volverán a buscarte.

Porque vas a irte, vas a dejarme. Cuando regrese a casa en dos semanas habrás encontrado un departamento donde alojarte, y todo rastro de tu existencia en el 199-1 del segundo barrio de Gangnam será inexistente.

Me dejarás y no volverás a buscarme.

Y yo me voy a quedar, contando cómo los rastros de nuestro amor caen como cenizas de mis manos.

Es lo que me debes, así que vas a dejarme.

Estoy terminando de escribir y tú sigues mirando desde la cama. Sé que estás sintiendo incertidumbre por primera vez, pero contrario a lo que piensas, no lo estoy disfrutando; tal vez ese siempre ha sido el problema, estamos llenos de contrastes. El más grande de ellos: yo sí te he amado. 

Por eso no te haré esperar tanto. Solo necesito terminar de empacar.

Mientras tanto, caminaré hasta ti y te daré un beso de buenas noches.

Esperando que sea el último.