Dolor

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Duele, duele tanto que no puedo seguir, duele tanto que me cuesta respirar, duele tanto que quiero dejar de vivir.

Pero mi corazón sigue latiendo tan lento y triste que lo siento como un infierno porque, aveces el infierno no es ese lugar ardiendo en llamas lleno de almas sin rumbo y sangre por todos lados, no, aveces el infierno es tan frío y vacío que es incluso peor que cualquier lamento. se convierte en hielo duro, oscuridad completa y soledad abrumadora.

Ese es el infierno que vivo todos los días, todas las noches; cada segundo desde que tengo memoria, incluso desde mucho tiempo antes. ¿Qué debo hacer para ser feliz? no, ese es un sueño muy grande y yo sólo busco un poco de esperanza, una pequeña luz que me guíe en el camino correcto, lejos de todo el mal que siempre me ha atormentado.

Pero lamentablemente me dí cuenta al pasar de los años que los sueños son simples fantasías, es la forma en la que el ser humano percibe lo que jamás podrá alcanzar, esos deseos tan mundanos que sólo existen en su simple e ignorante cabeza. no hay tal cosa como cumplir sueños, eso sólo existe en la vida de aquellos pocos que tienen un futuro cierto, pues los demás nos debemos encargar de vivir en la realidad, aquella que está llena de miles y miles de problemas, maldad, inmundicia y pecados; es esa la verdad del ser humano, el mal creado por nosotros mismos, una sociedad que desde su creación estuvo sucia, llenando la mente de cada individuo de falsedades sin fundamento para crear el poder en algunos pocos, usar a los demás para llegar a un fin egoísta ha sido siempre la base de esta sociedad. ¿No es acaso el mismo infierno?

Que me perdone Dios, si en verdad existiera pero él es el divino ejemplo de lo horrible y asquerosa que es la Tierra; un ser que está dispuesto a cometer un número infinito de pecados para satisfacer su placer de ser superior, obligándonos a creer en él sin pruebas, mandando a miles y millones de personas al mismísimo infierno por no creer en su débil palabra, obligando al ser humano a cumplir cada una de sus reglas inmorales para hacernos sentir que estamos haciendo un bien común, ¿no es lo mismo que cometer un crimer plagado de locura? Es impresionante lo bestial que puede llegar a ser el poder sin importar cuáles sean las consecuencias, sólo importa el placer del beneficio.

Poder, ese es el significado de la vida; tener ese sentimiento tan supremo que te llena el alma y te alimenta el ego tal como los árboles alimentan a las termitas. Debe ser magnífico tenerlo, saber que todos obedecen y actúan como tú lo dictas, tener el poder de golpear, humillar y denigrar sin importar el lugar o la situación. ¿Así es como te sientes, papá?

Aveces la vida realmente me hace pensar si vale la pena seguir adelante o simplemente debería terminar todo, tomar el camino fácil y dejar de pensar, de sentir, dejar de existir en esta tortura diaria que me carcome hasta los huesos como si de una presa mortal se tratase. Eso es la vida, no; eso es mi vida, tan lamentable y plagada de un caos generado por monstruos que sólo buscan el poder individual, ese sentimiento de placer que sólo se genera cuando todos a tu alrededor te temen y te tratan como el mismísimo Dios, creo que esa sería un buen sinónimo.

Dios, aquel ser asqueroso que hace tan mundana tu vida por no tener una propia, aquel que crea destrucción y sufrimiento por no seguir sus reglas, por no seguir su pensamiento tan bestial que aterra a cualquiera, incluso al más valiente en este mundo. Sino sigues sus ideales eres condenado a un sufrimiento eterno sin algún tipo de piedad, ni una pizca.

Pray for godDonde viven las historias. Descúbrelo ahora