Tan solo tú, mi vida entera...(GEMELIERS) SEGUNDA TEMPORADA {Sin Editar}

Maratón 3/4

A la mañana siguiente me desperté con Rubius cantando cumpleaños feliz y desafinando mucho. Teníamos las vacaciones del insti asi que debía de aprovechar. Me levanté y le abracé. Eran las 14:00, guau sí que había dormido. Directamente fui a comer y despues me fui a editar un vídeo mío para youtube. A las 16:00 vino Rubius con un esmoquin y me dijo que me arreglase. Me puse un vestido blanco *foto multimedia* pero el escote no era tan abierto porque hace dos semanas me lo arreglaron asi que no es tan abierto. Me puse unos tacones blancos y me peiné. No me quise poner maquillaje, solo un protector labial y un gloss. Salí de mi cuarto y no había nadie allí. El timbre sonó, fui a abrir y estaba Jesús con un esmoquin muy guapo. Quería abrazarle o desmayarme ahí mismo pero no podía.

-Jesús: ¿Va-vamos?

-María: Sí

Cogí mi pequeño bolso blanco y el me guió hasta la fiesta. Me tapó los ojos y me pidió permiso para darme la mano que mono pensé. Le di la mano y pude sentir como conectemos a pesar de que sonase a tontería. Me iba a caer yo por algo y el me agarró de la cintura haciendo que yo quedase pegada a su cuerpo. Volvió a darme la mano y subimos unas escaleras. Me quitó la venda con cuidado y todo estaba oscuro. De repente se enciende las luces y todos gritaton Sorpresa!. Les agradecí todo lo que estaban haciendo por mí y fui abrazandoles uno a uno. Las luces se apagaron, una se encendió en el escenario y estaba Jesús cantando. Otra luz se encendió a donde estaba yo, Dani me llevó hasta el escenario y me obligó a subir. Allí Jesús tomó mi mano y dejó de cantar para empezar a hablar.

-Jesús: María, hoy que es tu cumpleaños quiero decirte que siento mucho lo que te he hecho cuando no te lo merecias. Soy un tonto, imbécil y muchas cosas más que ha perdido a la persona más bella del mundo. He roto tu corazón y he roto el mío, pero lo que realmente quiero que sepas es que TE AMO. Nunca sabré soportar estar lejos de tí sin escuchar tu dulce voz o que tu estes entre mis brazos. Cada vez que te hicieron daño era como si me lo hiciesen a mí y tú has llegado a arriesgar tu vida por mí. Quiero pedirte perdón por todo aquello que te hice y me gustaría que volviesemos a ser la pareja feliz.
Yo no podía dejar de llorar, lo que dijo era muy bonito. Me solté de su mano y salí corriendo fuera de allí. ¿Por qué lo hice? Pues la verdad es que no lo sé, pero creo que debo de reflexionar.

*Narra Jesús*

Adoraba tener su mano con la mía, mientras que le decía todo aquello ella no paraba de llorar. Pero se marchó corriendo, ¿por qué lo hizo?. Dejé el micro y salí detras de ella hasta que perdí la pista de donde estaba. Seguí caminando...