Era un sábado temprano, Kenma se estaba preparando para ir a casa de Kuroo para pasar el fin de semana junto a el como siempre. No era la primera vez que pasaba esto pero desde que Kenma aceptó sus sentimientos por el mayor se sentía nervioso. Normalmente no llevaba ropa suya pues siempre usaba la ropa de Kuroo la cual le doblaba la talla, según él era cómoda, o al menos esa era su excusa para usarla.
Kenma se dispuso a escribirle a Kuroo para que lo buscara, a pesar de que sus casas estaban cerca a Kenma no le gustaba ir solo, por eso siempre Kuroo lo iba a buscar y para ser franco eso no le molestaba para nada. Así fue como Kuroo fue a parar a casa de Kenma para buscarlo. Kuroo no toco la puerta simplemente entro, después de todo no era la primera vez que iba a casa de Kenma. Los padres de kenma habían salido a hacer algunos encargos por lo que no estarían por buen tiempo en su casa. Kuroo subió las escaleras y se dirigió a la habitación del menor para que se fueran. Al entrar encontró a un kenma medio deprimido ya que no encontraba el abrigo que solía usar. Kuroo no lo pensó y se quitó el que tenía puesto y se lo tiro a Kenma tapándole el rostro.
- "Siempre usas los míos así que puedes usar este" dijo sonriéndole Kuroo a kenma.
- "Si, esta bien" le respondió Kenma sintiendo sus mejillas calientes.
Así fue como partieron a casa de Kuroo agarrados de manos, a pesar de no ser algo más que mejores amigos ellos hacían este tipo de cosas. Aunque nunca han hecho más que eso en estos años de amistad. Mientras tanto para Kenma era diferente ya que sentía que su corazón latía como loco. Él no sabía si Kuroo sentía lo mismo por lo que jamás se atrevería a decirle, pues no quería perderlo por esos estúpidos sentimientos. Lo que no sabía es que Kuroo también sentía lo mismo que él , y tampoco quería decirle para no perderlo.
Al llegar Kenma dejó algunas de sus cosas en la habitación de Kuroo y se propuso a jugar con su Nintendo. Habían pasado algunas horas desde que llegaron a la casa del mayor, eran al rededor de las 7:00pm. Kenma estaba sentado con sus piernas cruzadas tratando de pasar algún nivel de alguno de sus videojuegos. Kuroo mientras tanto ya había terminado de hacer algunos deberes que sus padres le habían encargado antes de irse, así que no tenía nada que hacer. Al entrar a su habitación le vino una idea y fue molestar al pequeño gatito enojón que se encontraba peleando con su Nintendo encima de su cama. Kuroo se sentó justo atrás de Kenma y lo rodeó con sus brazos. Kenma sintió un escalofrío recorrer su espalda, al mirar su Nintendo la pantalla decía "Game over" por lo que lo dejó a un lado. Kuroo se quedó desconcertado ya que ni Dios podía alejar a Kenma de su Nintendo pero justo ahora el mismo lo había hecho a un lado. Kuroo hace tiempo se había dado cuenta de sus sentimientos por Kenma y ahora lo veía más lindo que antes y las ganas de besarlo cada vez que el menor lo veía aumentaban más. Sabía muy bien que disfrazaba la amistad que tenían para poder estar más cerca de Kenma, él lograba ver que el menor no se negaba por lo que en momentos juraría que él también sentía lo mismo. Kuroo se perdió en sus pensamientos hasta que la mano de Kenma lo sacó de ese transe. El azabache volvió en si y miro a Kenma, el menor lo miraba de una forma como si quisiera decir algo.
Kenma quería decirle lo que sentía y casi lo lograba pero las palabras nunca salieron. De repente miro a otro lado y recogió su Nintendo. Kuroo se quedó analizando lo que acababa de pasar y seguía sin entender. Para él, Kenma era un libro abierto y podía saber lo que estaba pensando, pero justo en ese momento no. No lograba entender a Kenma por primera vez en su vida.
🌙🌙🌙
Habían pasado algunas horas después de ese momento incómodo . Ambos comieron algo y se dirigieron a la Sala para ver alguna película. Kuroo se dedicó a hacer "Popcorn" mientras que Kenma preparaba la bebidas. Al final ambos se recostaron en el sofá y se dispusieron a ver la película.
Kuroo de vez en cuando miraba disimuladamente a Kenma, y se preguntaba a si mismo ¿Como es que puede ser tan hermoso? Kenma por otro lado quería estar más cerca de Kuroo, pero estaba muy nervioso. Antes de descubrir sus sentimientos podía hacer cualquier cosa con Kuroo sin que su corazón se volvieran loco. Aun así alejó ese nerviosismo y se recosto en el pecho de Kuroo. No pasó ni un segundo cuando Kenma empezó a escuchar que el corazón de Kuroo latía a mil por hora. Se levantó y le preguntó a Kuroo si estaba bien.
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🌙A Solas (kuroken) 🌙
FanfictionHabía pasado una semana desde que Kenma había aceptado sus sentimientos por Kuroo. ¿Ahora, ese sentimiento podrá afectar la relación de ambos? Kenma pondría aprueba esa pregunta pasando un fin de semana completo con Kuroo 𝗮 𝘀𝗼𝗹𝗮𝘀, ya que los...